Por Arnulfo R. Gómez (Catedrático comercio internacional)

Ellos se ríen de mi porque soy diferente

Yo me río de ellos porque todos son igualitos

Anónimo

La Secretaría de Economía, recientemente ha señalado que, con el objetivo de reactivar la economía de México, es necesario fortalecer y consolidar este año, la relación con Reino Unido, Corea, Ecuador y Brasil a través de la actualización y formalización de nuevos Tratados de Libre Comercio.

Con este enunciado pareciera que, la firma de un TLC con esos 4 países, fuera una tablita de salvación para la economía mexicana pues, supuestamente, generará un enorme dinamismo que determinará su reactivación.

Desgraciadamente, en los 28 años más recientes, después de entrada en vigor del TLCAN, la firma de TLC´s es el elemento único y fundamental de la estrategia de comercio exterior y el desarrollo de la economía de México, abarcando a un total de 52 países adicionales, así como con la adopción de una apertura comercial basada en una desgravación unilateral; sin embargo, la realidad nos dice que este deseo y su concreción no es la Ambrosía esperada.

Así, podemos ver que la evolución de la relación con los 54 países no ha sido muy favorable para México pues, si en el año 1993 teníamos déficit con 29 de esos países por un total de 11,894 millones US; para el año 2021 fue con 36 y un déficit de 65,466 millones US; y para el periodo completo de 1993/2021, el déficit acumulado se incrementó a 39 países por 1,011,563 millones US.

Esta situación resulta más deprimente debido a la apertura comercial realizada y basada en una desgravación unilateral de tal manera que, con los países con los que no hemos firmado un TLC, en 1993 registramos un déficit con 80 de ellos, por 3,731 millones US; para el 2021, el déficit fue con 101 países por 139,255 millones US; y para el periodo 1993/2021 con 111 países y un saldo negativo de 1,539,949 millones US.

Incluyendo a las dos categorías de países, el total pasó de 109 países, en 1993, con un déficit de -15,625 millones US; en 2021 con 101 países y -139,255 millones US; y para el periodo completo, 150 países por -2,551,512 millones US.

Comentarios

La propuesta y expectativa que nuestros funcionarios presentan con esos 4 países, parece que no tendrá los efectos deseados debido al desarrollo histórico de las relaciones bilaterales que hemos tenido con esos países.

En el año de 1993, los cuatro países sólo absorbieron el 1.15% del total de nuestras exportaciones, equivalentes a 597 millones US; para el 2021 el porcentaje fue de 2.83% con 14,002 millones US; y para el periodo completo fue de 2.17%, con 163,179 millones US.

Por lo que se refiere a las importaciones, los porcentajes fueron superiores con 4.39%, 5.96% y 5.56%, respectivamente, con cifras equivalentes a 2,669; 30,139 y 427,023 millones US, lo que generó déficits de -2,072; -16,137 y -263,843 millones US.

De los cuatros países de referencia, sólo tenemos un balance positivo con Ecuador, mismo que, en el año 1993, fue de 19 millones US; para el 2021, de 418 millones US y, para el periodo 1993/2021, de 8,991 millones US.

En el caso de Brasil, ni siquiera se puede hablar de tratar de alivianar la situación pues, la exportación fue de 293 millones US en 1993, de 3,657 millones US en 2021 y de 67,493 millones US en el periodo 1993/2021, equivalentes a los siguientes porcentajes: 0.56%; 0.74% y 0.90%; en tanto que las importaciones correspondientes fueron de 1,201; 8,806 y 110,382 millones US, con porcentajes más elevados de 1.98%, 1,74% y 1.44%.

Con Corea, la situación es mucho peor pues, nuestras exportaciones en los mismos periodos fueron de 27; de 6,712 y de 41,690 millones US, en tanto que las importaciones se elevaron a 837; a 19,055 y 263,556 millones US, generando sendos déficits que correspondieron -810, -12,343 y -221,865 millones US.

Teniendo en cuenta el gran entusiasmo que nuestros funcionarios han mostrado para iniciar las negociaciones con el Reino Unido, a continuación, presento un análisis más detallado de nuestra relación bilateral.

En 1993, nuestra exportación al Reino Unido fue de 220 millones US; en 2021 de 3,032 millones y, en el periodo 1993/2021, de 41,892 millones US, equivalentes a 0.42%; 0.61% y 0.56% de nuestras ventas al exterior.

Por el lado de las importaciones, las cifras corresponden 593; 2,096 y 49,972 millones US, lo que generó un déficit de -373 millones US en 1993; un superávit de 936 en 2021 y un déficit de -8,080 millones para el periodo 1993/2021.

Importante es señalar que, en los tres años más recientes, México ha registrado un superávit con el Reino Unido, mismo que ha sido generado por el incremento en la exportación de oro en bruto, un producto netamente mexicano, mismo que en el periodo 2008/2020 pasó de 442 a 1,320 millones US y que, en el año 2020, representó el 50.4% del total.

Del universo de los 35 principales productos de exportación mexicana en este último año, adicional al oro en bruto, figuran otros 10 productos: cerveza de malta, PVC, tequila, envases de vidrio, aguacate, ácido tereftálico, bombonas, aceite de ajonjolí y café que totalizaron 178 millones US, equivalentes a 6.74% del total exportado a este mercado.

Incluyendo al oro, estos 11 productos totalizaron 1,498 millones US y 57.2% de nuestros envíos a ese mercado, en tanto que los 24 restantes productos, mayormente elaborados bajo el esquema IMMEX, sumaron 844 millones US, equivalentes a 27.5%, de tal manera que los 35 principales productos exportados, representaron el 85.5% del total de nuestras ventas a ese país.

Por lo que se refiere a las importaciones, el principal producto fue el whisky, con 93 millones US, seguido de motores con 92, mercancías para el ensamble de aeronaves 84, medicamentos 81, automóviles 63 … y en 35º lugar, butanona con 7 millones US. Así, los 35 principales productos sumaron 817 millones US, equivalentes al 44.99 % del total.

Desgraciadamente, la publicación de información sobre los principales productos objeto de intercambio con cada país, la SE la suspendió a partir del año 2020 por “cuestiones de confidencialidad., La información estadística de todos los productos importados y exportados con cada país, también dejó de publicarla desde 2018.

Como una simple referencia sobre los productos objeto de intercambio con el Reino Unido, en 2017, el total de exportación mexicana hacia ese país incluyó 1,729 fracciones arancelarias.

En el caso de la importación fue de 4,651 fracciones, es decir, 169% superior lo que significa que, México tiene una estructura de exportación concentrada en un reducido número de productos en tanto que, la del Reino Unido, más diversificada y, además, con mayor valor agregado.

Apuntes finales

Durante los 20 años más recientes, las relaciones con el Reino Unido tuvieron como marco el TLCUEM ya que era miembro de la Unión Europea y, para las negociaciones individuales, mucho de lo que era la base en aquel acuerdo se tomará en cuenta.

En este sentido, habrá que partir del hecho de que, en un universo de 35 productos, el principal producto de exportación en el año 2020, oro en bruto, fue adquiriendo importancia en nuestros envíos hasta llegar al 50.42% y que, un 6.74% adicional, está constituido por otros 10 productos netamente mexicanos para alcanzar un total de 57.16%.

El 27.5% restante, es de productos elaborados con algunos insumos importados bajo el esquema IMMEX, lo que necesariamente seguiremos haciendo, algunos de ellos de origen inglés, situación que también se presentará en el 14.5% remanente.

Así mismo, debo señalar que, de las 35 principales importaciones procedentes del Reino Unido, 17 se pueden considerar productos de consumo final en tanto que, 18 son insumos que necesariamente seguiremos importando para mantener a la planta productiva en operación pues, desgraciadamente, el nivel competitivo de nuestro marco sistémico es deplorable y, por tanto, numerosos bienes no pueden producirse en nuestro territorio competitivamente.

Tomando como referencia el Indice de Competitividad del Foro Económico Mundial (WEF) del año 2019, México está ubicado en el 48º lugar de competitividad mundial, en tanto que el Reino Unido en el 9º, situación que representa una desventaja enorme para nuestro país, debiendo hacer hincapié en que, de las 19 variables que componen este Indice, para México se presenta una situación desfavorable en todas ellas, por lo que se puede prever que la evolución de nuestro comercio no será muy positivo, con excepción del sector agroindustrial, en donde se ven mejores posibilidades para nuestras exportaciones.

Sin duda alguna, poco éxito podemos esperar de este nuevo TLC pues la pésima calificación que el Foro Económico Mundial le adjudica a las instituciones públicas mexicanas, a la actuación del sector público, a la tramitología, a su visión de largo plazo y a la incidencia de la corrupción, son graves impedimentos para lograrlo, independientemente de que la calificación en todos los demás factores a considerar nos ubican en un lugar deplorable que nos augura un futuro poco halagüeño.

Especial referencia hay que hacer a las instituciones públicas pues su baja calificación se refleja en la incapacidad para definir una estrategia integral y realista que incluya competitividad, fomento industrial y comercio exterior, así como la promoción de las exportaciones y la inversión extranjera directa.

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