***Presentan libro en la FES Acatlán
***Lectura que une a las generaciones
Valle de México, a 27 de mayo del 2022.- “Esperamos que disfruten estas valientes narrativas, todas y cada una de ellas están impregnadas de amor, de fuerza y de un fuego que enciende la llama interior de todos, organiza la rabia y abona a allanar el camino de la literatura para futuras mujeres que quieran contar sus historias”, dijo Marisabel Macías Guerrero, antologadora del libro El feminismo me jodió la vida (y después me salvó), de Corda Ediciones, que se presentó en el Auditorio Miguel de la Torre, de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.
Organizado por la Comisión Interna para la Igualdad de Género de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, el evento contó con la participación de la doctora Cynthia Acosta Ugalde, coordinadora de dicha comisión, la maestra Sandra Cara Camarena, editora del libro, las autoras Daniela Caballero, Yadira del Mar, Débora Hernández, y Macías Guerrero quienes presentaron la publicación que será de apoyo para los estudiantes universitarios que quieran ver una perspectiva del feminismo y de ayuda para las mujeres maduras que están en esa búsqueda de redescubrir las facetas que por tradición o costumbre no las pudieron vivir, sino hasta ahora y gracias a este tipo de lecturas pueden conocer.
Este proyecto nació a partir de la creación del Circulo Literario de Mujeres, fundado en 2018, que, como muchos otros colectivos feministas, es a partir de una necesidad, deseo y un sueño común, tener un espacio de mujeres y para mujeres y, ahora, por medio de esta obra, comparten lo que para muchas fue un salvavidas y un altavoz en un mundo que pareciera las quiere calladas y sumisas.
“El libro abre espacios de reflexión, diálogo, dan voz a innumerables rostros de mujeres que desde sus roles dejan de serlo, destacando y enalteciendo el papel de ellas como escritoras, no solamente como objetos de representaciones literarias. Da espacio a las nuevas generaciones de escritoras que, por medio de sus letras, logran redescubrir, crear conciencia, generar nuevas ideas y propuestas, no solamente a las mujeres, sino inclusive a los hombres,”, dijo Acosta Ugalde.
La obra está compuesta por 16 relatos, en el que se tocan temas como: el papel de la mujer en los tiempos de pandemia, los diferentes estereotipos de belleza, el guardar el peso, los diversos tipos de maternidad, cuestiones de roles de género y cuestionamientos sobre si lo que realizan es el verdadero trabajo con el que soñaron.
Con Escalar el amor propio, Daniela Caballero expresa que la idea surgió a raíz de la educación y enseñanza que le dejaron su mamá y hermanas para entender cosas del feminismo, como al observarlas, determinar sí se veían bien o se sentían gordas, feas, si tenían celulitas, y se concentraban en encontrar esos defectos, así como la importancia de arreglarse para agradarle al otro, “si juntamos ese tiempo que le dedican, nos daríamos cuenta de todo lo que hemos perdido, que bien lo podríamos utilizar en hacer mejores cosas que agradarle a los otros. En el texto hablo de lo difícil que fue aceptar mi cuerpo, las lonjitas, las celulitis, las estrías las tenemos todas y quizás no se fijan bien, por eso para mí era importante revindicar esta parte del amor propio”, destacó.
Por su parte, Débora Hernández, con Los 97 kilos que más quiero, expone en sus letras una forma de ‘revanchismo’, de la difícil etapa que tuvo como niña al pelearse siempre con el estereotipo del peso, que jamás la hicieron sentirse suficiente, “a raíz de una experiencia que me hizo bajar de peso, reflexioné lo difícil de ser niña o niño, de no poder comer lo que quisieras para cumplir los estándares que te marca la sociedad, dejando una herida en mi infancia muy grande y la arrastré. Cargar esto y escribirlo fue algo que debía a mi Débora de niña. El feminismo te abraza y te atrapa, porque te encuentras con mujeres que no te juzgan, te abrazan, te defienden y están ahí para ti”, expuso.
A su vez, Yadira del Mar, con Mujeres trabajadores, hace un homenaje a las amas del hogar y a esas féminas obreras, inspirada por su mamá y hermanas, las cuales deben pasar por muchos obstáculos como clasismo, racismo, además de la inseguridad y acoso durante el traslado a sus centros laborales, que son siempre procesos difíciles, pero que las hicieron fuertes para abrir espacios y, por ello, buscó reconocer su labor.
“Esta obra es un resultado de estos espacios que hemos creado como mujeres comprometidas, representa el primer paso de muchos otros que deseamos dar para impulsar a jóvenes y talentosas mujeres que hoy tengo el orgullo de nombrar como escritoras. Es una oda a la lucha que muchas mujeres de diferentes contextos hemos realizado y que hoy juntas estamos presentando aquí. Queremos que sea un espejo para todas las mujeres y una guía para que se reconozcan. Somos una generación muy distinta a la que ahora están experimentando las jóvenes”, señaló Cara Cámara, quien dijo estar emocionada de presentar este proyecto en su “alma mater”, como egresada de la licenciatura en Relaciones Internacionales de esta Facultad.