***La pandemia Covid-19 generó estragos en el sector

Valle de México, a 15 de octubre.- Artesanos y guías de turistas de la región del Valle Teotihuacan unieron esfuerzos para enfrentar la crisis económica que ha generado la pandemia Covid-19, y de esta manera los segundos incluyen en los recorridos que ofrecen la visita a los talleres de elaboración de piezas artesanales hechas con materiales de obsidiana y otras piedras.

Son varios los talleres donde se elaboran las piezas en la región, ubicados en poblados cercanos como el de San Francisco Mazapa.

Agapito Hernández Nieto y su familia, quienes son artesanos de la citada población, comentaron que la situación en cuanto a la llegada de turistas que visitan la zona arqueológica de Teotihuacan ha sido difícil, pues el cierre del conjunto piramidal por varios meses redujo de forma drástica las ventas de las artesanías.

Mencionó que la reapertura de la ZAT, así como la alianza que hicieron con los guías, los ha ayudado a mejorar su economía, porque aunque sean pocos los turistas, éstos llegan hasta la calle donde tiene ubicado su taller, uno de los más conocidos de la zona, en donde los visitantes pueden ser partícipes de la elaboración de un dije en un taller de media hora, que les es impartido en forma gratuita.

“Los meses de agosto y septiembre no son muy buenos para la llegada de visitantes, pues es el período de regreso a clases de los niños y los padres de familia andan muy gastados, pero poco a poco se ve mejorando la situación”, expresó Agapito Hernández.

Dijo que a los turistas que llegan a su taller se les enseña cómo se trabaja la obsidiana y la pieza que elaboran se les obsequia, y explicó que la mayoría de los visitantes adquieren alguna otra artesanía que sea de su agrado, además de que también pueden comprarles algún licor, rompope, o mermelada que elaboran con xoconostle.

“A nuestros visitantes les enseñamos cómo deben cortar la obsidiana, redondearla, darle forma y perforarla para luego tallarla, ya sea un óvalo, círculo o gota; se empareja y queda lista para pulirla y después abrillantarla”, resaltó.

“Ellos ven nacer su pieza que se les obsequia y quedan encantados con lo que aprendieron”, narró el maestro artesano.

Manifestó que además de este curso, a los turistas que van con tiempo también los invitan a participar en un taller en el que les enseñan a trabajar el barro, para lo cual se les presta un molde con el que elaboran alguna pieza que se les regala.

Agregó que también les enseñan a elaborar, con el xoconostle, el licor o rompope y las mermeladas, “de esos talleres se encargan mi esposa y mi nuera, aunque mis hijos y yo también sabemos trabajarlos, porque con la venta de todos estos productos es como nos sostenemos  y vamos saliendo adelante”.

Sobre las piedras que trabajan para crear sus piezas de joyería y de ornato, destacó que además de la obsidiana, están los cuarzos, el jade, la turquesa, la malaquita, entre otras.