Por Vidal Ibarra Puig[*]
Corea exportaba en 1980 una proporción importante de manufacturas de Baja Tecnología (que incluye entre otros Textiles, ropa, calzado y manufacturas de cuero). Las manufacturas de Mediana Tecnología (entre las que se encuentran Vehículos de pasajeros y sus partes, vehículos comerciales, motocicletas y sus partes; así como Maquinaria y motores, máquinas industriales, bombas, barcos y relojes), con aproximadamente el 20 por ciento de las ventas totales al exterior, eran las predominantes en estas transacciones, como se puede observar en la figura 1.
Para el año 2000, y una vez superada la crisis de las monedas asiáticas (la cual llevó a redefinir las relaciones existentes dentro de los conglomerados llamados chaebols), las exportaciones de manufacturas de Alta Tecnología ya eran más del 30 por ciento de las ventas foráneas del país (dentro de las manufacturas de Alta Tecnología se encuentran Máquinas para procesamiento de datos, de telecomunicaciones, equipos de televisión, y transistores, turbinas, equipos generadores de energía y otras). Hay que comentar que Corea del Sur elabora planes quinquenales de desarrollo y precisamente estos sectores se encontraban dentro de los sectores industriales a desarrollar desde 1980; y por otro lado, muchos de estos productos son elaborados precisamente por los chaebols, que aprovechan la cada vez mayor capacitación de la mano de obra; ver figura 2. Es menester mencionar que, al igual que China, Corea del Sur apostó fuerte por la educación [1].
Para el año 2022, las exportaciones dominantes fueron las de Mediana Tecnología, seguidas por las de Alta Tecnología. Recordemos que Corea del Sur y México hicieron fuertes inversiones en el sector siderúrgico en la década de los 70s del siglo pasado; pero mientras en México se dejó de apoyar este sector, Corea siguió adelante y es ahora, junto con China, uno de los mayores productores de barcos, actividad que en México es prácticamente inexistente. La consistencia de políticas económicas a lo largo del tiempo, en otras palabras, la instrumentación de políticas económicas de estado, está también en la base de este cambio en el patrón de las exportaciones coreanas.
Concluyendo, la adopción de políticas económicas de estado, el apoyo a la educación de excelencia y la consistencia en las políticas públicas, han permitido que Corea pase de ser exportador de Baja Tecnología, a transformarse en un exportador de bienes de Mediana y Alta Tecnología.
[1] Ver Ibarra-Puig V. y McCoy (2012) “La tendencia a crear una ventaja competitiva basada en el aprendizaje. Los casos de Corea del Sur, la India y México”, en ‘La competitividad como elemento clave para la recuperación económica’, Sánchez J., Gaytán J., Vázquez M., Vázquez G. y Vargas V. (coords.), Red Internacional de Investigadores en Competitividad, México.
[*] Profesor en el Departamento de Economía, UAM Azcapotzalco.