Dictado a Javier Ortiz de Montellano
Y su Ángel de la Guarda visitó a Simplicio en un sueño confortándole y le dijo:
Bendito seas , Simplicio, porque has permanecido puro,sin robar, ni mentir, ni traicionar a la 4T. Tu nombre está inscrito en el libro del Cielo, en la columna de la Santa Izquierda. Benditas sean las remesas de dólares que han apuntalado al peso fortachón. Benditos los fuertes aumentos de salarios mínimos por encima de la inflación que han permitido a tantos salir de la pobreza extrema. Benditas las pensiones a los adultos mayores. Bendito el Doctor López-Gatell y benditas las vacunas que salvaron muchas vidas. Benditas las respetadas santas encuestas que mantienen a raya las ambiciones de los políticos al representar fielmente la voluntad del pueblo bueno y mantienen la esperanza en un partido unido. Pues yo he rogado por ti, amado Simplicio, para que a pesar de todo el mal y las malas cursilerías y lambisconerías que rodean la Santa Alianza con la 4T, tu fe no falle; y Tú, una vez que hayas oído devotamente todas las mañanas las palabras del Señor (Beso agradecido y con todo respeto su Santa Mano), fortalezcas a tus compañeros y los ánimos de los afiliados, exhortándolos a que perseveren en la fe, y recordando que es necesario que a través de las regeneradoras santas tribulaciones mantengan la esperanza en el eterno reinado celestial de la Santa 4T.
Y ¡Ay de aquellos que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno dicen malo, y aun en sus sueños siguen planeando maldades, y que al llegar el día las llevan a cabo porque tienen el poder en sus manos! Codician terrenos, y se apoderan de ellos; codician casas, y las roban impunemente gracias al Cártel Inmobiliario. Por eso el Altísimo me envía a decirles por tu muy apreciable conducto, Simplicio, lo que dice el Señor: «Yo también tengo planes contra ustedes. Algún día se acabarán los abrazos y al final de los sexenios voy a enviarles una desgracia de la que no podrán librar su cuello, y ya no podrán caminar orgullosamente porque serán tiempos de desastre. Y en la infernal columna de la Derecha quedarán inscritas todas sus malditas acciones y reacciones, malandros del inframundo, los más malos de Malolandia. Y algún día pagarán impuestos por las Malditas divisas mal habidas del narcotráfico y las extorsiones del crimen organizado que hacen subir los precios del limón y de tantos otros productos que contribuyen a la inflación. Maldito sea el virus chino del Covid y sus réplicas, cuya Peste el Demonio esparció por el mundo causando desolación acompañado por los Jinetes del Apocalipsis, Muerte y Hambre. Maldito el ruso Putin y los mercenarios de Wagner por montar el apocalíptico Caballo Rojo de la Guerra contra Ucrania y atizar la inflación mundial. Malditos los que no respetan las encuestas y traicionan a su Partido para buscar nominaciones por otras oposiciones cualesquiera…
Pero el sueño terminó cuando el Ángel de la Guarda de Simplicio contendía con el Diablo y los autónomos Fiscales de la República, disputando con ellos por el alma y cuerpo de Lozoya por el Pemexgate y de Ovalle por el Gran Fraude en Segalmex. El Ángel no se atrevió a pronunciar juicio de maldición contra éste sino que dijo: “El Señor te reprenda” y lo recomendó a la Secretaría de Gobernación. Pero maldijo a Lozoya y sus compinches, que esperan el juicio final…algún día de estos.
Cuando Simplicio despertó, todavía la 4T estaba allí.
Amén, dijo Simplicio.