***En los últimos cuatro años la migración decreció: Cemla; en contraste, aumentó la de Guatemala, Honduras, El Salvador, República Dominicana, Venezuela y Colombia… Menos migrantes pero más remesas, debido a mejores salarios
Valle de México, a 8 de octubre del 2023.- Entre los años 2018 y 2022 el tamaño de la población mexicana inmigrante en Estados Unidos se redujo en casi medio millón de personas, esto debido “al débil flujo migratorio que fue superado por el retorno voluntario y compulsivo de migrantes y la mortalidad”, mientras que del 2015 al 2022 “la población inmigrante y de la proveniente de Latinoamérica presentaron aumentos significativos”, sobre todo de Guatemala, Honduras, El Salvador, República Dominicana, Venezuela y Colombia”.
El Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla) difundió datos sobre el fenómeno migratorio en su nota de remesas del mes de octubre, elaborada por Jesús A. Cervantes González y Denisse Jiménez, director de Estadísticas Económicas y Coordinador del Foro de Remesas de América Latina y el Caribe del Cemla y economista del Cemla, respectivamente.
En el análisis se hizo la aclaración de que las cifras contrastan “con la percepción general de que hay un número significativo de mexicanos que están emigrando hacia Estados Unidos”, pero se remarcó que “durante la última década en Estados Unidos se redujo de manera notable el tamaño de la población mexicana inmigrante”.
En este sentido, es conveniente mencionar que, en efecto, en el mes que corre el Observatorio de Migración y Remesas, de la firma bancaria BBVA, reportó que “los encuentros migratorios en Estados Unidos están en su máximo nivel”, y que tan sólo en el mes de agosto se registraron 304 mil aprehensiones e inadmisibles. “Durante los primeros ocho meses de 2023 ya se tienen registrados casi 2 millones de encuentros migratorios, destacando un aumento importante de las personas que viajan en unidades familiares”.
En el acumulado enero-agosto de este año, el Observatorio informó que se registraron 503 mil encuentros migratorios con población mexicana que busca llegar a los Estados Unidos. “Le siguen en orden de importancia la población migrante de Venezuela (213 mil), Honduras (147 mil), Guatemala (142 mil) y Haití (127 mil). Cabe señalar que una parte importante de este flujo migratorio atraviesa el territorio mexicano para llegar a Estados Unidos”.
No obstante, el Cemla remarcó que con información de la “American Community Survey”, de la Oficina de Censos del vecino país, se obtuvo que “El tamaño de la población mexicana inmigrante en Estados Unidos alcanzó su nivel máximo en 2007 y luego de altibajos por varios años, comenzó a disminuir a partir de 2014, de manera que para 2022 ya había caído en 1,035,987 personas (un millón 35 mil 987) y en 9.1 por ciento. En ese mismo periodo la población total de origen mexicano se incrementó en 2.2 millones de personas”.
“La debilidad del flujo migratorio mexicano hacia Estados Unidos ha implicado que su participación en la población total en Estados Unidos haya disminuido de 3.9 por ciento en 2007 a 3.2 por ciento en 2022, mientras que en la población inmigrante cayó de 30.8 por ciento en 2007 a 23.1 por ciento, y en la población total de origen mexicano se redujo de 40.2 por ciento en 2007 a 28.5 por ciento en 2022”, refirió el estudio.
Aclaró que “la población total de origen mexicano, suma de nativos e inmigrantes, ha continuado aumentando, pero a un menor ritmo en parte por la debilidad de la migración neta mexicana”.
Destacó que “la contracción del grupo migratorio mexicano ha sido mayor en el caso de los hombres que de las mujeres”, y que, por el contrario, “ha habido incrementos significativos en Estados Unidos en el total de migrantes, en los de origen latinoamericano y especialmente en los grupos migratorios guatemalteco, hondureño, dominicano, venezolano y colombiano, así como en los originarios de la India y China”.
“El porcentaje de población mexicana inmigrante que ingresó a Estados Unidos en 2010 o en los años subsecuentes está muy por debajo de lo observado en los otros grupos migratorios”, resaltó la nota, y expuso que “la disminución de la población mexicana inmigrante de 2014 a 2022, se integró por descensos de 569 mil 083 hombres (menos 9.2 por ciento) y 466 mil 904 mujeres (menos 8.4 por ciento).
“Hay dos indicadores que ilustran la debilidad del flujo migratorio mexicano. En 2022 el porcentaje de la población mexicana inmigrante que había ingresado a Estados Unidos en 2010 o en los años subsecuentes resultó de solo el 18.4 por ciento, mientras que ese porcentaje se situó en 31.4 por ciento en la población inmigrante total y en 28.5 por ciento en los provenientes de Latinoamérica”, subrayó la nota.
Añadió que ese indicador “alcanzó 38.1 por ciento, 42.5 por ciento, 52.9 por ciento y 68.3 por ciento en los inmigrantes de la República Dominicana, Guatemala, Honduras y Venezuela, respectivamente”.
Anotó que del 2007 al 2022 el porcentaje de población mexicana inmigrante en Estados Unidos siguió una tendencia a la baja “pero repuntó en 2022. Ese año el número de nuevos inmigrantes mexicanos alcanzó 160 mil personas, pero ese número fue superado por el agregado de los retornos voluntarios e involuntarios a México y las defunciones en dicho grupo migratorio, lo que implicó una caída neta en el total de migrantes mexicanos en ese país”.
El Cemla observó que “la disminución de la población mexicana inmigrante en Estados Unidos se ha concentrado en su totalidad en población que no cuenta con ciudadanía, segmento que incluye a los indocumentados”, y también que “de 2014 a 2022 la caída de la población mexicana inmigrante sin ciudadanía resultó de 1.7 millones de personas, en tanto que en ese periodo un número importante de mexicanos obtuvieron la naturalización o ciudadanía de ese país”.
En la misma forma, la nota reportó que durante 2022 “la población mexicana inmigrante en Estados Unidos resultó de 10 millones 678 mil 502 personas, lo que representó el 3.2 por ciento de la población total de ese país, y la población total de origen mexicano (nativos e inmigrantes) alcanzó 37 millones 414 mil 772 personas, 11.23 por ciento de la población total, de manera que una de cada nueve personas en ese país es de origen mexicano”.
Mencionó que tal evolución de la migración mexicana “ha implicado que haya aumentado la mediana de edad en el grupo migratorio mexicano, igual que el porcentaje de personas con 55 años o más y los que son afectados por alguna discapacidad, mientras que ha caído la participación de la población entre 18 y 44 años de edad. Los indicadores demográficos de la población mexicana inmigrante ya muestran claras diferencias con relación a los grupos migratorios centroamericanos”.
En el análisis se expuso también que en el 2022 la población de origen hispano ascendió a 63.6 millones de personas, el 19.07 por ciento de la población del país, con lo que una de cada 5.2 personas es de origen hispano”.
Más remesas con menos migrantes
“Una pregunta relevante es cómo conciliar la disminución de la población mexicana inmigrante en Estados Unidos con el significativo aumento del ingreso de México por remesas”, observó el Cemla, afirmando que hay varios factores que concilian estas tendencias: 1) la situación económica del grupo migratorio mexicano ha tenido una mejoría significativa; 2) el porcentaje de la población mexicana inmigrante que cuenta con ciudadanía se ha incrementado, lo cual posibilita a los migrantes a tener acceso a diversas prestaciones sociales, pero lo más importante es que mejora su potencial de ingresos por trabajo; 3) hay un fuerte diferencial entre los ingresos laborales que obtienen los migrantes mexicanos con ciudadanía y los que no cuentan con ella, “aun si consideramos mismo género, escolaridad y antigüedad de residencia en ese país”; 4) durante la última década en el grupo migratorio mexicano aumentó el porcentaje de los que participan en el mercado laboral y tienen empleo y ello ocurrió tanto en los hombres como en las mujeres.
Asimismo, 5) en Estados Unidos han aumentado las remuneraciones medias en dólares constantes de los trabajadores mexicanos inmigrantes; 6) de 2015 a 2022, el ingreso total de dicho grupo migratorio repuntó en casi 100 mil millones de dólares al alcanzar en el segundo año 336 mil 650 millones de dólares, cifra equivalente a 23 puntos porcentuales del PIB de México.
Además, en la nota se observó que “el avance económico del grupo migratorio mexicano también es notorio en la significativa disminución que ha registrado el porcentaje de los que se encuentran en condiciones de pobreza”, y que a estos factores que soportan la evolución de las remesas, “es que en los años recientes los migrantes mexicanos tuvieron que realizar un mayor esfuerzo para apoyar a sus familiares en México mediante las remesas”, ayudando a sus familias a “enfrentar los efectos económicos de la pandemia de Covid-19 y, segundo, ante el limitado desempeño de la economía mexicano que amplió la brecha de ingresos entre México y Estados Unidos”.
Así, la reducción del flujo migratorio y el incremento son dos temas que “hasta ahora… no han sido incompatibles, pero no hay que descartar que en los próximos años pudieran entrar en conflicto”.