Valle de México, a 6 de enero 2022.- Como consecuencia de la profunda integración económica con Estados Unidos, la mayor inflación en este país, de 6.8 por ciento (la más alta en los últimos 40 años), ha contribuido al repunte del fenómeno en México, y debido a que en el vecino país “se mantendrá elevada durante 2022, “pudiera haber más inflación importada”.
El Banco de México difundió hoy la minuta de la última reunión de los integrantes de la Junta de Gobierno sucedida en diciembre, con Alejandro Díaz de León todavía como gobernador (Victoria Rodríguez ya despacha en ese cargo, como primera gobernadora de Banxico).
En el documento, se refirió que miembros del banco Central mencionaron que el balance de riesgos en relación con la trayectoria de la inflación se ha vuelto a deteriorar y se mantiene al alza.
Expusieron que el fenómeno de reajuste en precios relativos y los argumentos sobre la transitoriedad de las presiones inflacionarias “ya no parecen apropiados para explicar la situación actual, ya que el aumento de la inflación ha sido persistente y generalizado”.
Uno de los integrantes observó que “la inflación general y sus componentes muestran una tendencia al alza bajo distintas metodologías. Agregó que esto ha comenzado a contaminar las expectativas de inflación y que la prolongación del aumento de precios no sólo es reflejo de los cuellos de botella, sino también de las presiones de demanda a nivel mundial. Otro notó que el debate sobre la transitoriedad de las presiones ha quedado atrás ante el cúmulo de choques inflacionarios que perdurarán por más tiempo”.
En la minuta se estableció que todos los integrantes “mencionaron que las expectativas de las inflaciones general y subyacente para 2021, 2022 y para los próximos 12 meses volvieron a incrementarse, así como las de mediano plazo, mientras que las de largo plazo se han mantenido estables en niveles superiores a la meta. La mayoría destacó que las expectativas correspondientes al cierre de 2022 ya se encuentran por encima del límite superior del rango objetivo”, (3 por ciento, más-menos un punto porcentual).
Es pertinente mencionar que en noviembre pasado, la tasa de inflación de Estados Unidos se ubicó en 6.8 por ciento, mientras que en nuestro país el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC, inflación) alcanzó 7.37 por ciento, el mayor porcentaje desde hace más de 20 años.
No se “comerá” el aumento a salarios: AMLO
Por otro lado, durante su conferencia mañanera, en la que se anunció que el primer jueves de cada mes se presentará un balance de la situación económica del país para hacer contraste con la que difunde la oposición, el presidente Andrés Manuel López Obrador
Sostuvo que no obstante el aumento en la inflación en el mundo y en nuestro país, “no se ha comido la carestía el incremento al salario mínimo”.
Reconoció que el fenómeno inflacionario y la carestía afecta, “pero como nunca en la historia reciente se había aumentado tanto el salario mínimo, por eso no se lo ha comido; se lo comía, se lo tragaba, en el período neoliberal”.
Hay que recordar que Luisa María Alcalde Luján, titular de la Secretaria del Trabajo federal, informó a principios de diciembre que 6.3 millones de trabajadores serían beneficiados con el nuevo aumento salarial desde el 1 de enero de 2022.
Las percepciones salariales mínimas pasaron de 141.70 a 172.87 pesos diarios, mientras que en la zona libre de la frontera norte subió de 213 a 260.34 pesos diarios.
El Presidente aprovechó la conferencia para exhibir supuestos gasolinazos difundidos en redes sociales, asegurando la falsedad de lo difundido, y afirmó que “por eso es doblemente cuestionable el racismo y el clasismo, porque el que es racista o clasista, no óуlo discrimina, sino niega la importancia que tiene el pueblo para que todos podamos vivir mejor”.