Por Arnulfo R. Gómez (Catedrático comercio exterior)

Ellos se ríen de mi porque soy diferente

Yo me río de ellos porque todos son igualitos

Anónimo

Recientemente elaboré un artículo en el que hice referencia al creciente déficit comercial de México con China, teniendo como antecedente una nota publicada por Roberto Morales en el diario El Economista en que señala que, de acuerdo con datos de la Administración General de Aduanas de China, el déficit con ese país se duplicó en los 5 años más recientes.

Tal como lo presenta, pareciera que este elemento tan negativo es una novedad, prácticamente de generación espontánea, sin embargo, hay que señalar que esta es una situación histórica muy dolorosa que va más allá del año 1950, pero, tomando como base el proceso de liberalización dogmática iniciado en 1995, podemos ver que este deterioro histórico se ha profundizado más en los 27 años más recientes.

Al respecto, hay que comentar que sí, en 1993, el déficit con China fue de -341 millones, en el año 2000 llegamos a -2,676 millones US, lo que implica un crecimiento de 685%, equivalente a -2,335 millones US que, en el contexto de la relación actual con ese país podría considerarse minúsculo; sin embargo, a partir de ese año, el déficit ha crecido de una manera exagerada pues, para el 2023, alcanzó la cifra de -104,133 millones US, con un acumulado total de 1 billón 142,514 millones US en el periodo 1993 – 2023, equivalente al 64% del PIB Total de Mexico en el año 2023.

Comentarios. 

A pesar del exagerado crecimiento del déficit, pareciera que los expertos mexicanos en comercio exterior y los representantes de México en ese país, no se dieron cuenta de este proceso dañino y hablaban de lo bien que iban las relaciones y la velocidad con que estaba creciendo el intercambio total con China mismo que, entre 1993 y 2023 fue de 28,728% al pasar de 431 a 124,249 millones US y, para ellos, este “desarrollo” era fabuloso. 

Desgraciadamente, esos funcionarios fueron incapaces de tomar en cuenta la estructura del intercambio comercial y lo dañino que resultaba un desbalance enorme originado por el reducido valor de las exportaciones mexicanas y las crecientes importaciones procedentes de China.

En numerosas ocasiones advertí sobre la estructura de los intercambios comerciales con China misma que, en los años precedentes, arrojaba un creciente déficit para México, sin embargo, nuestros “diplomáticos” en ese país y los altísimos funcionarios expertos del comercio exterior mexicanoseñalaban que no había problema pues, de un 65 a 70%, la importación era de insumos para maquilar o ensamblar en nuestro territorio y generar reexportaciones a EEUU y Canadá, lo que ayudaba a mantener a la planta productiva nacional en operación. 

Así, México se convirtió en un simple trampolín chino para acceder al mercado norteamericano según se puede ver en el siguiente vínculo.

Voces México (vocesmexico.com) abril 30 de 2024

Las consecuencias de esta negligencia y aberración son verdaderamente obscenas pues, el aparente desconocimiento por parte de esos funcionarios mexicanos de la estructura productiva de México, de la operación real del comercio internacional y de nuestro comercio exterior, se ha traducido en un déficit de terribles dimensiones con China que, en el primer semestre de 2024, alcanzó una cifra récord de 56,148 millones US, el más elevado de los 31 años más recientes, mismo que ha dañado enormemente a la planta productiva nacional.

Este proceso de deterioro es consecuencia de la adopción de un sistema simplista de comercio exterior basado en la importación de insumos para maquilar y ensamblar para reexportar con reducido valor agregado que, fue generado por el axioma que hizo muy famoso al Doctor Jaime Serra Puche de “la mejor política industrial es la que no existe” el cual pronunció, en febrero de 1989, paradójicamente, a sólo 3 meses de haber asumido su cargo de Secretario de Comercio y Fomento Industrial, enfrente de los 32 Consejeros Comerciales de BANCOMEXT en el extranjero que habían sido convocados a México para conocer las estrategias, programas y proyectos que la SECOFI y demás Secretarías de Estado iban a implementar en el sexenio.  

México: globalización tóxica abril 24, 2024

Así, la ventaja de tener un TLC con el mercado más grande del mundo fue desperdiciada pues, no hubo una estrategia que nos permitiera mantener la competitividad del marco sistémico, así como tampoco aprovechar las ventajas comparativas ni desarrollar ventajas competitivas con una estrategia ad hoc de tal manera que, a partir de 1993, en que el Valor Agregado en la exportación total mexicana fue de 58.8%, se redujo constantemente hasta llegar a la sólo 39.13% en 2012 y, el porcentaje de productos exportados, condicionados a la importación de insumos extranjeros pasó de 67.72% a 74.99%. 

Excluyendo al petróleo, el porcentaje del Valor Agregado se redujo de 52.91% a 31.18%, de tal manera que el porcentaje de productos de exportación condicionados a la importación de insumos extranjeros se incrementó de 77.41% a 84.78%. 

Conviene señalar que, a partir de 2012, las estadísticas de comercio exterior con el desglose de operaciones Definitivas e IMMEX dejaron de ser publicados por la SE y sólo, en el documento publicado recientemente con el título Secretaría de Economía 2024 – 2030, la SE incluye información sobre el porcentaje de la exportación mexicana que depende de la importación de insumos extranjeros señalando que, en el periodo 2013 – 2018 fue de 80.49%, es decir, un incremento de 5.5% con respecto al año 2012.

Bajo esta perspectiva, sólo el 20% de la exportación total, es de productos netamente mexicanos. 

Sin duda, un retroceso serio que habla de la carencia de una estrategia que permita el desarrollo sano de nuestro comercio exterior y, lo peor, de la maquila, misma que presumen como el paradigma mundial del proceso de producción compartida transfronteriza, sin embargo, cada día es más decadente pues su participación en la generación de riqueza en nuestro territorio se ha reducido grandemente en los 6 lustros más recientes. 

Por eso, la creciente importación de bienes e insumos procedentes de China, situación que también se presenta con numerosos países y, muy especialmente, con casi todos los países asiáticos y, más particularmente, con los del TPP-11, el acuerdo que nuestros “expertos” pugnaron por firmar hasta desgarrarse la camisa.

Para ellos, pareciera que tampoco había antecedentes de la pésima situación que se vivía en el intercambio comercial con los 6 nuevos socios de Mexico del TPP-11 mismo que, en el periodo 1993 – 2018, registró un déficit que pasó de -545 a -13,050 millones US, con un acumulado de -144,086 millones US en ese lapso. 

Como consecuencia de esta situación, los primeros 5 años de operación del TPP-11 han arrojado resultados mucho más terribles con un déficit de -118,933 millones US. 

En este contexto, a continuación, incluyo un vínculo en donde comento la propuesta del Embajador de México en Corea, Bruno Figueroa Fischer -muy similar a la de otros embajadores y funcionarios- quien propone la firma de un TLC con ese país, situación que me parece totalmente negligente y atendiendo modelos económicos de desarrollo con elementos que han resultado muy nocivos para nuestro país como es el caso de la firma de numerosos TLC´s y una desgravación arancelaria unilateral, basada en una apertura comercial dogmática y sin sentido práctico, adoptada por los teóricos de nuestro comercio exterior.

https://vocesmexico.com/opinion/mejoraria-la-economia-mexicana-con-un-tlc-con-corea/septiembre 30 de 2022

No dudo que Bruno Figueroa Fischer sea un buen Embajador que desempeñe sus funciones protocolarias adecuadamente, sin embargo, al promover la firma de un TLC, parece que no conoce de comercio exterior ni realizó labores de inteligencia comercial ya que omite hablar del enorme desbalance comercial con Corea, mismo que es originado por la nula competitividad del marco sistémico mexicano frente a ese país pues, de las 19 variables que la miden, México sólo presenta ventaja en dos, así como una enorme desventaja en 17 de ellas, según datos del Foro Económico Mundial (WEF), debiendo destacar que, el bajo nivel de competitividad que dicho organismo nos atribuye, tiene su origen en la pésima calidad de las instituciones públicas y de sus funcionarios, relegándonos al 98º lugar de un universo de 134 países.

Funcionarios mexicanos en la Luna agosto 19 de 2019

Apuntes finales 

En el año de 2023, la exportación mexicana a China fue de 10,858 millones US, situándose como nuestro 3er cliente más importante, en tanto que las importaciones de ese país ascendieron a 114,191 millones US, siendo nuestro 2º proveedor mundial. 

Sin duda alguna, la actuación de los encargados del comercio exterior mexicano y la de nuestros representantes diplomáticos en Asia, deja mucho que desear pues, fueron incapaces de percibir una situación totalmente negativa para México, además de que, para ellos, el intercambio comercial crecía constantemente, pero sin tener la capacidad de analizar su estructura ni de considerar las repercusiones negativas que ello representaba para México. 

Teniendo como referencia estas premisas, la realidad nos dice que, en los 30 años más recientes, los resultados del comercio exterior mexicano han sido terribles debido a que ha estado caracterizado por enorme simulación y mayor improvisación pues, no ha habido respuesta alguna a la altura de las necesidades de nuestro país, es decir, se ha carecido totalmente de una estrategia, con programas proyectos y políticas públicas realistas que permitan el desarrollo económico de México y la generación de riqueza en nuestro territorio.

Para finalizar con este, que me parece un largo episodio deplorable para México, debo señalar que hace 49 años, en 1975, elaboré mi tesis profesional comparando la evolución y el esquema de promoción del comercio exterior de México con China y Japón, y las conclusiones de la misma siguen siendo vigentes, es decir, no hay una estrategia en la relación con China.

Desgraciadamente, parece que vivimos en el país de “no pasa nada”, aunque cada día seamos más pobres pues, del año 2001 al 2022, descendimos la 8ª a la 16ª posición como economía mundial, en tanto que su PIB Per Cápita cayó del 47º al 78º lugar, periodo durante el cual, prácticamente han estado vigentes los TLC’s que han firmado con 52 países adicionales, supuestamente, para lograr el desarrollo económico de México y el bienestar de sus habitantes.

Sin duda, lo señalado por el que fuera Secretario de Economía en el periodo 2012 – 2018, Dr. Ildefonso Guajardo Villarreal el pasado 10 de septiembre, se ajusta con enorme precisión al pésimo manejo del comercio exterior de México en los 30 años más recientes y sobre el cual nos dice textualmente: 

En un mundo global y regionalmente integrado, las pendejadas de uno son inmediatamente aprovechadas por otros.

Infortunadamente, el ejemplo de la relación de México con China, con el TPP-11 y con muchos otros países cumplen enteramente con la aseveración del Dr. Guajardo Villarreal.