Por: Víctor M. Zendejas Orozco*
Las culpas que le han endilgado a algunos gobiernos, como el del presidente Andrés Manuel López Obrador, por el manejo de la pandemia provocada por el Covid-19, son infundados o vertidos por ignorancia en medios de comunicación masiva y redes sociales ya que de acuerdo con expertos internacionales en salud pública, la principal responsabilidad recae en la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El manejo de la pandemia a nivel global es atribuido principalmente al trabajo que ha llevado a cabo en la materia la OMS, organismo que ha sido ampliamente criticado por expertos internacionales, como los que participaron recientemente en una conferencia de Reuters Next.
Una de las agencias de noticias internacionales más importante, Reuters, publicó un despacho en el que cita que la conclusión de los expertos es que la OMS debiera examinarse después de la pandemia y reformarse “para liberarla de influencias políticas y darle más independencia”.
Reuter precisó que los epidemiólogos británico y sueco, respectivamente, Neil Ferguson, y Anders Tegnell, así como y Chikwe Ihekweazu, director del Centro de Control de Enfermedades de Nigeria, dijeron que la OMS tenía dificultades “a la hora de liderar una respuesta global a la pandemia”.
Los especialistas demandaron que la OMS tenga independencia (ya que) “por lo general está influenciada por los Estados grandes. Históricamente han sido países occidentales como Estados Unidos, y ahora también es China, y eso a veces puede resultar un desafío en situaciones como el año pasado”.
Según Reuters países como Estados Unidos, Australia y la Unión Europea, han pedido que la OMS sea reformada o reestructurada en un contexto de críticas a su respuesta al brote de COVID-19.
La OMS se ha distinguido por no poner interés en fomentar un cambio de hábitos alimenticios acordes con la naturaleza a fin de que las familias mejoren en el consumo de productos y alimentos que son menos dañinos para la salud.
Poca o nula ha sido la información al respecto y en los medios le han apostado todo a depender sólo de medicamentos y vacunas con un alto costo en lo particular para quienes enferman. Un posible cambio en el modelo de consumo y alimentación se ha dejado de lado.
*Presidente de la ONG Franature