***Como parte de los trabajos realizarán un congreso y publicarán un manual con los casos de estudio
Valle de México, a 30 de marzo del 2022.- Toda vez que en el mundo reconocen la existencia de la primera mujer robot y del primer ciborg, la Facultad de Estudios Superiores Acatlán emprendió una investigación multidisciplinaria cuyo objetivo es la creación de un simulador en el que se encuentra involucrada la tecnología y, al mismo tiempo, sirva para que lo use la comunidad universitaria.
La doctora Alba Gabriela Cabriada Jarquín, adscrita a la licenciatura de Relaciones Internacionales del Sistema de Universidad Abierta y Educación a Distancia de Acatlán, ofreció detalles del proyecto denominado Comprender, actuar y transformar nuestra sociedad tecnológica mediante la poleomología.
“El objetivo es revisar casos de disrupción tecnológica porque en la vida cotidiana utilizamos un gps, internet, sin embargo, como se trata de aspectos cotidianos, no vemos tan evidentes los cambios tecnológicos, la realidad que afectan el devenir como sociedad. En el proyecto estudiamos tres casos, analizaremos la tecnología y cómo afecta a la sociedad en su conjunto”, mencionó.
Hasta el momento cuentan con dos casos, al que habrá de agregarse un tercero. En un par de meses organizarán un congreso en el Programa de Investigación del campus donde habrán de presentar avances y con los artículos que de ahí se desprendan armarán una publicación electrónica, es decir, un manual con los casos de estudio.
Cabriada Jarquín habló del primer caso: “Neil Harbison nació en Reino Unido, con acromatismo, es decir, su visión era en blanco y negro por lo que le instalaron una antena para percibir los colores. Con la antena que tiene puede ver los colores, incluso ahora percibe colores infrarojos, pues la antena transforma los tonos que recibe en sonido”.
Entrevistada en el cubículo que comparte en el Programa de Investigación, consideró que “por una parte se encuentra el desarrollo de prácticas médicas y legales. La operación que le practicaron para implantarle la antena no estaba regulada médicamente, en términos de salud por el gobierno británico. Cabe aclarar que una persona es libre de poder transformar su cuerpo como desee, sin embargo, se generó controversia con gran impacto al momento que Harbison debió renovar su pasaporte, ahí surgió el contexto internacional llevándose a cabo un juicio en el que fue considerado como el primer ciborg a nivel mundial”.
Ese caso analizado por el grupo interdisciplinario, Cabriada Jarquín encuentra dos elementos: “el libre derecho de una persona sobre su cuerpo. Por otra parte, la condición de que en esta libertad habrá quienes estén en posibilidades de pagar una antena, un brazo biónico, y seres humanos sin recursos económicos para realizar estas prácticas. Si actualmente los seres humanos nos distinguimos por desigualdad económica o académica, con la masificación de estas prácticas tecnológicas aumentará la desigualdad en términos tecnológicos”.
El segundo caso de estudio: “Sophia Hanson, la primera mujer robot que interactúa y aprende determinadas cosas, inclusive sensaciones. El gobierno de Arabia Saudita la hace ciudadana, la reflexión es: las circunstancias en las que viven mujeres saudis, con determinados derechos, ¿cómo puede suceder este? Ceden derechos a una mujer robot, y qué tipo de derechos tendrá por ser mujer robot”.
En consideración de los dos casos de estudio, la investigadora se refirió al ámbito nacional: “este tipo de reflexiones nos sirven para plantearnos nuestro papel como seres humanos; replantearnos el humanismo. Hemos llegado a una etapa en la que es inevitable que transitemos a seres humanos híbridos. Si decidimos transitar a esta lógica “evolutiva” humano-máquina, la comunidad universitaria debería ponerse a pensar que no hemos resuelto cuestiones clave de equidad, de derechos humanos como para todavía complicarlo, incluyendo el aspecto tecnológico. Ese aspecto tecnológico nos permitiría solucionar esa parte humana que no hemos logrado”.
En cuanto al tercer caso de estudio, Cabriada Jarquín advirtió que saldrá de dos propuestas: el robot REK o un caso ecológico. “cuando terminemos de analizar los dos casos en el extranjero, la tercera opción puede ser REK, el primer robot que tiene la Secretaría de Relaciones Exteriores en México que presentó el canciller Marcelo Ebrard Casaubón, en una reunión de asuntos ministeriales; una de las funciones del robot sería agilizar determinados trámites. También está la implementación en Europa sobre la creación de contenedores de basura que detectan los desperdicios orgánicos e inorgánicos para su separación, se llama vigilantismo ecológico”.
Desde la perspectiva de la catedrática de la FES Acatlán, los 22 meses de confinamiento por cuestiones sanitarias dejaron claro que: “aspectos de la realidad virtual favorecen la educación. El hecho que hayamos tenido estos medios tecnológicos durante la pandemia, sirvieron para que los estudiantes pudieran continuar su educación con diferentes técnicas de estudio”.
Se trata de una investigación multidisciplinaria con sede en nuestro campus y en la que intervienen catedráticos de la ENES Juriquilla, la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, la Facultad de Economía, entre otras instancias de la UNAM, además de la colaboración de dos becarias y dos estudiantes que prestan el Servicio Social.
Plan de trabajo
Cabriada Jarquín se refirió al plan de trabajo, en el primer año analizarán los señalados casos, en el segundo construirán objetos de aprendizaje para los alumnos de Acatlán y de la UNAM: “se trata de un simulador pensado para los estudiantes, toma de decisiones donde se encuentre involucrada la tecnología”.
Desde que comenzó el proyecto, en julio de 2021, han celebrado sesiones de trabajo vía zoom. A mediados de abril del año en curso organizarán en el Programa de Investigación de la FES Acatlán, donde presentarán los casos de estudio y sus avances, esperan saber acerca de las condiciones sanitarias para que se lleve a cabo de forma presencial o permanecen con las reuniones a distancia. La recopilación de artículos en el congreso será la base de una publicación electrónica, es decir, un manual con los casos de estudio.
“Casos de estudio contextualizados, compartiendo los datos, las disciplinas que trastoque en términos de filosofía, sociología, economía”, dijo por último la investigadora en la entrevista.