***Diésel, con mínimos en los estímulos complementarios (subsidios)
Valle de México, a 18 de noviembre.- La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) redujo los estímulos fiscales a las gasolinas Magna y Premium y los mantuvo en el caso del Diésel, aunque nuevamente los primeros combustibles no recibirán subsidios (estímulos complementarios) y en el tercer caso los redujo de manera sustancial en más de 87 por ciento.
La dependencia dio a conocer los montos de los estímulos fiscales y los estímulos complementarios en el Diario Oficial de la Federación (DOF) para la semana del 19 al 25 de noviembre, como parte de las acciones del APECIC (Acuerdo de Apertura Contra la Inflación y la Carestía), para buscar contener la inflación, que en octubre retrocedió a 8.41 por ciento después de que en septiembre alcanzó 8.70 por ciento.
Por un lado y según el acuerdo difundido por la SHCP, para los estímulos fiscales se mantuvieron al ciento por ciento en el caso del Diésel, es decir, los transportistas de carga, mercancía y de pasajeros no pagarán 6.03 pesos por litro de Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS).
Mientras, para los consumidores de la gasolina verde o de bajo octanaje se redujo el estímulo fiscal de 89.92 por ciento a 65.44 por ciento, esto es, el apoyo disminuyó de 4.93 pesos a 3.59 pesos (menos 1.34 pesos).
Para la gasolina roja o de alto octanaje, la reducción fue de 82.24 por ciento a 51.86 por ciento, pasando de 3.81 pesos a 2.40 pesos (menos 1.41 pesos).
En cuanto a los estímulos complementarios o subsidios, se mantuvieron en “cero” para los casos de las gasolinas Magna y Premium, y para el Diésel disminuyeron de 2.46 a 0.40 pesos, esto es, 2.06 pesos menos (o menos 83.74 por ciento).
Estas medidas contenidas en el APECIC se vienen aplicando desde marzo pasado cuando los precios internacionales del barril del petróleo comenzaron a elevarse como consecuencia de la pandemia Covid-19 y, principalmente, del conflicto Rusia-Ucrania, vigente todavía.
El gobierno federal ha estado aplicando diversas políticas de carácter fiscal, como esos estímulos a las gasolinas y eliminación de aranceles a productos, mientras que el Banco de México, ha estado apretando por el lado de la política monetaria, elevando la tasa de interés hasta 10 por ciento, todo con el fin de revertir las presiones inflacionarias.