***Descenso gradual de las inflaciones en mercancías y servicios; inflaciones general y subyacente, con pronóstico al alza “para algunos trimestres”
Valle de México, a 14 de diciembre del 2023.- La Junta de Gobierno del Banco de Mexico determinó mantener en 11.25 por ciento la tasa de referencia, al considerar que los pronósticos para las inflaciones general y subyacente “se revisan al alza para algunos trimestres”, luego de la incorporación de un descenso más gradual de las inflaciones de las mercancías y de los servicios.
El Banco Central dio a conocer el anunció de política monetaria, después del ligero rebote de la inflación en noviembre, ubicándose en 4.32 por ciento desde 4.26 por ciento en octubre, cortando una racha de nueve meses consecutivos a la baja.
La tasa de referencia se ha mantenido en 11.25 por ciento, su máximo histórico alcanzado, desde marzo pasado.
En el anuncio de Banxico, se prevé “que el proceso desinflacionario continúe, ante la postura de política monetaria y la mitigación de los choques derivados de la pandemia y de la guerra en Ucrania. Sin embargo, los pronósticos actualizados incorporan un descenso más gradual de las inflaciones de las mercancías alimenticias y de los servicios. Por esta razón, los pronósticos para las inflaciones general y subyacente se revisan al alza para algunos trimestres”.
“Desde la última reunión de política monetaria, la inflación general anual exhibió cierto incremento. En noviembre se ubicó en 4.32%. Ello, debido al aumento del componente no subyacente. La inflación subyacente siguió descendiendo, si bien continuó en niveles altos al situarse en 5.30% en ese mismo mes. Las expectativas de inflación para el cierre de 2023 disminuyeron en el caso de la inflación general, mientras que las correspondientes a la subyacente aumentaron. Las de mayor plazo permanecieron relativamente estables en niveles por encima de la meta”, destacó.
Agregó que “se sigue anticipando que la inflación converja a la meta en el segundo trimestre de 2025”, y que estas previsiones están sujetas a riesgos. Al alza: i) persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados; ii) depreciación cambiaria; iii) mayores presiones de costos; iv) que la economía muestre una resiliencia mayor a la esperada; y v) presiones en los precios de energéticos o agropecuarios. A la baja: i) una desaceleración de la economía global mayor a la anticipada; ii) un menor traspaso de algunas presiones de costos; y iii) que los niveles más bajos del tipo de cambio respecto de inicios de año contribuyan más que lo anticipado a mitigar ciertas presiones sobre la inflación”.
“Se considera que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza”, resaltó el documento.
En tales condiciones, “la Junta de Gobierno evaluó la magnitud y diversidad de los choques inflacionarios y de sus determinantes, así como la evolución de las expectativas de mediano y largo plazos y el proceso de formación de precios. Reconoció que el proceso desinflacionario ha avanzado en el país. No obstante, estimó que el panorama sigue implicando retos”.
“Con base en lo anterior y tomando en cuenta la postura monetaria ya alcanzada y la persistencia de los choques que se enfrentan, la Junta de Gobierno, con la presencia de todos sus miembros, decidió por unanimidad mantener el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día en 11.25%. Con esta decisión, la postura de política monetaria se mantiene en la trayectoria requerida para lograr la convergencia de la inflación a su meta de 3% dentro del horizonte de pronóstico”, informó Banxico.
La Junta de Gobierno consideró que “para lograr la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3 por ciento, será necesario mantener la tasa de referencia en su nivel actual por cierto tiempo. Ello tomando en cuenta que, si bien el panorama todavía se percibe complicado, se ha avanzado en el proceso desinflacionario”.