***Egresada de la licenciatura en Comunicación de la FES Acatlán triunfa a nivel internacional como modelo exclusiva de prestigiosa marca

Valle de México, a 3 de marzo del 2024.- De niña, Celic Dorig Martínez soñaba con ser actriz. Siempre participó en obras, festivales y actividades escolares en los que pudiera mostrar su talento. En su último año en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Naucalpan, optó por buscar un lugar en el Centro Universitario de Teatro (CUT) de la UNAM y lamentablemente no fue elegida, por lo que decidió estudiar la licenciatura en Comunicación en la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.

Fue aquí donde parecía encontrar ese camino rumbo al mundo del espectáculo. Cuando ingresó al taller de actuación en el Centro Cultural Acatlán participó en obras y algunos cortos experimentales, pero un día su vida dio un giro. “Muchas personas me decían por qué no intentaba modelar, pero no quería y fue gracias a mi mamá, quien conocía a una chica que trabajaba en una agencia de castings para comerciales de televisión que me la presentó; no era lo que exactamente buscaba. Comencé a checar agencias, una me aceptó, pero era de modelaje, ilusamente creí que me mandarían a series de Netflix, pero todas las pruebas se enfocaban al modelaje”, cuenta en entrevista.

A partir de ahí, su trabajo comenzó a gustar, aunque su prioridad era la carrera en Acatlán. Y lo que comenzó como un hobby se convirtió en una pasión de la cual se enamoró; ese sueño de estar en foros de televisión, escenarios teatrales o ver su nombre en marquesinas de cines cambió por el de las pasarelas, las fotos, modelando lujosas vestimentas y piezas de ensueño de prestigiados diseñadores en las grandes ciudades del mundo como Nueva York y París.

La pandemia, clave

Alegre, con la vitalidad que le dan sus 23 años, y satisfecha por poder narrar su ascendente carrera, la hoy egresada de la licenciatura en Comunicación de la FES Acatlán confiesa que, gracias a su tenacidad, disciplina y suerte, fue que la marca Christian Dior la contratara como su modelo exclusivo durante un año. “Aunque no se hubiera dado este camino de oportunidades, si no fuera por la pandemia, en ese tiempo, a la par que modelaba, me ayudó bastante que las clases fueran en línea, lo que me permitió terminar mi carrera de Comunicación y, paralelo, comenzar en este maravilloso mundo del modelaje, no lo puedo negar, le saqué buen provecho al estudiar en línea, ya que me permitió viajar y moverme por el mundo”, destacó.

De Coacalco para el mundo

Desde Milán, Italia, la oriunda del Municipio de Coacalco de Berriozábal, Estado de México, confiesa que emprender el camino sola no ha sido fácil, al recordar esos momentos, suspira, se aguanta las lágrimas cada vez que recuerda lo que dejó en “su barrio”, del que jamás se olvida. Eso y el apoyo incondicional de sus padres y hermano son su mayor aliento.

“”Extraño ese apapacho familiar, hubo etapas que me tardé de seis a ocho meses en regresar y ver de nuevo a mi gente. El que me mantenga aquí, sin duda, es gracias a ellos. Tratar de sobrellevar la salud mental en el modelaje es bastante difícil, es un trabajo bastante fuerte, siempre hay mucha competencia, comparaciones, muchos celos, entonces, sí creo que eso y el estar bien mentalmente ha sido bastante duro de llevar. Pero siempre el cariño de mi gente lo guardo, recuerdo el día que subí unas fotos a mis redes sociales y puse de Coacalco para al mundo, fue tendencia mundial, me emocionó mucho, ahí me di cuenta del cariño de muchas personas que me ha apoyado hasta el momento”.

Gustosa de los ritmos latinos, salsa, cumbia, son cubano, pero más de las canciones de Vicente Fernández, lectora de novelas románticas, actualmente se perfecciona en el idioma inglés, la orgullosa universitaria recuerda con mucho cariño su etapa en los salones de la FES Acatlán y cada uno de sus profesores que siempre la impulsaron. “Aunque solo estuve un poco más de la mitad de la carrera en forma presencial en la FES, la disfruté, tuve muchos profesores muy buenos que me apoyaron en mi avance en el modelaje y les pedía permiso para un casting. El convivir con mis amigas y amigos fue bastante divertido, quizá debí disfrutarla más, pero nunca olvidaré que gracias a la educación recibida me he podido desenvolver por acá, algo de ese aprendizaje grabado en mi mente y utilizo aquí, fue enseñarme a trabajar en equipo, eso es algo de los grandes aportes que Acatlán me dejó y aplico”, detalló.

Mantenerse entre las mejores

Aunque extraña mucho la comida mexicana, en especial el chicharrón con salsa verde, Celic adelantó que seguirá su carrera de modelaje en los Estados Unidos, en especial en Nueva York, una vez finalizado el contrato con Dior, pues tiene proyectos en la unión americana, y con la alegría de estar más cerca de su México que tanto añora.

“Eso es lo que más gusto me dará, ya que estaré un poco más cerca de mi gente, aparte, aquí hay buenos restaurantes mexicanos, y si hay algo que me pone alegre es la comida, qué te puedo decir. Espero seguir con los proyectos que ya tengo, seguir poniendo el nombre de México, de la FES Acatlán y la UNAM en alto, al igual que muchas grandes modelos mexicanas que aquí hay, yo pongo mi granito de arena. Esto es algo que me encanta y que espero seguir haciendo por mucho tiempo más”.

Finalmente, sin considerarse un ejemplo, a pesar de lo lejos que ha llegado, la bella coacalquense envió un mensaje a todos las y los jóvenes que tienen un sueño o meta como objetivo: “lo que hagas, no lo hagas por hacerlo nada más, si especialmente te vas a dedicar a algo por bastante tiempo de tu vida, que te haga feliz y que realmente te apasione, échale muchas ganas, busca la manera de encontrar lo que realmente te gusta y te hace feliz, no tienes que estar cumpliendo estándares o quedar bien con los demás.  Las cosas que hagas, realízalas con mucha pasión y felicidad, todo lo que vayas a hacer, si te hace feliz, no lo pienses”, finalizó, no sin antes presumir con mucho orgullo, que además de mexicana tiene tatuados los colores azul y oro de la Universidad y la FES Acatlán.