Por Javier Ortiz de Montellano
Diablo: Hola, Simplicio, ¿a qué te dedicas?
Simplicio: A respirar…
Diablo: ¿Ya te pegó la nueva variante del Covid, Eris? ¿Dónde conseguiste el respirador artificial?
Simplicio: Nada de eso, gracias a Ya Sabes Quién. Yo soy un respirador natural , buen Discordiano de nacimiento.
Diablo: ¿Discordiano? ¿Y eso qué es?
Simplicio: El estado natural del ser humano: la Discordia.
Diablo: Ah, eso me gusta, le doy “like”, me encanta la discordia, mi figura mitológica favorita es Eris, diosa de la discordia y de la envidia.
Simplicio: Dije buen Discordiano, no Discordiano dedicado al Mal, como tú…comprenderás. En la mitología griega, Hesíodo en los Trabajos y días, distingue dos diosas diferentes llamadas Eris: una fomenta la guerra y envidia malvadas, y la otra, es sana para los humanos, incluso logra que los perezosos trabajen duro; pues un hombre se vuelve ansioso por trabajar cuando tiene en cuenta a su vecino, un rico se apresura por poner su casa en orden, y el vecino compite con su vecino en apresurarse tras la riqueza. Esta Discordia es equivalente a la sana competencia de Adam Smith…
Diablo: Vaya, vaya, ahora me resultaste un Discordiano Neoliberal, seguidor del neoconservador Hayek, que inspiró a la darwiniana Señora Thatcher en Inglaterra y ahora sus ideotas impulsan al economista anarcoide Mister Milei en Argentina…
Simplicio: Te equivocas, Diablo malhora, ¡Hoy Vive Keynes todavía en muchas partes! Y como él mismo decía en vida: “ Las ideas de economistas y filósofos políticos, cuando tienen razón o cuando se equivocan, son más poderosas de lo que generalmente se cree. En realidad, el mundo es gobernado por algunas de ellas. Hombres prácticos, que creen que están bastante exentos de cualquier influencia intelectual, son, por lo general, esclavos de algún economista muerto”. (J. M. Keynes, The General Theory of Employment, Interest and Money, 1936). Para que aclares tus discordianos prejuicios, mi fosfo Diablo, te recomiendo que leas Keynes vs Hayek…
O, Hayek vs Keynes
Pero si eres de la Generación Equivocadísima de “jóvenes” no muy brillantes aunque sí muy fosforescentes cual luciérnagas (fosfo fosfo) y la lectura te da flojeritis, puedes ver este rap de Hayek y Keynes, con subtítulos en español…
Diablo: Ah, qué ducho eres para navegar y google-plagiar de Wikipedia, Simplicio. Pero si en esas andamos Yo, que soy más viejo y más leído que tú, prefiero citar de la fuente original y me gusta la leyenda más famosa protagonizada por Eris que cuenta cómo inició la Guerra de Troya y que narra Homero en La Ilíada (entre paréntesis mis agregados):
“Tanto los dioses y diosas como diversos mortales fueron invitados a la boda de Peleo y Tetis, sólo que (con falta de todo respeto), la diosa Eris no fue invitada debido a su naturaleza problemática. Así que Eris apareció en la fiesta con la llamada Manzana de la discordia, una manzana dorada con la palabra kallisti (‘para la más hermosa’ o ‘para la más bella’) inscrita, que arrojó entre las diosas provocando que Afrodita(diosa del amor); Hera (esposa del Machuchón Zeus, jefazo de los dioses griegos que habitaba en el Olimpo, algo así como Palacio Nacional en los viejos tiempos del Porfiriato) y Atenea (hija de Zeus), reclamasen la Manzana para sí, iniciándose una fuerte riña. Zeus, para no tener que elegir entre las diosas, puesto que una era su esposa y otra su hija, encargó ser juez a Paris. Entonces Hermes (ese travieso y chismoso “comunicador”) le transmitió el mensaje divino a Paris, príncipe de Troya, de que Él tendría que elegir a la más hermosa (siendo como era la (in) moralidad mitológica griega, cada una de las tres diosas intentó sobornarle para que la eligiera: Hera le ofreció poder político y propiedades, hoy diríamos inmobiliarias; Atenea le prometió sabiduría y destreza militar (con todo y Guardia Nacional) y Afrodita lo tentó con la mujer más hermosa de la tierra, Helena, esposa de Menelao, rey de Esparta. Siendo Paris un joven apasionado, terminó por conceder la manzana dorada a la erótica diosa Afrodita, raptando luego a Helena y provocando así la Guerra de Troya”. Y desde entonces, no paran los conflictos…(like)
Simplicio: ¡Maldito y Malvado Discordiano! ¿De dónde me saliste tan ilustrado si tú nomás promueves lecturas de uno y otro bando para sembrar la Discordia, como “Encabronados”, de Julio Hernández “Astillero” o sobre X: “SOY CABRONA Y MEDIA”…Deberías recomendar el nuevo libro de George Friedman, aunque parece que todavía no lo traducen:
En español sería algo así como: La tormenta antes de la calma: la discordia de Estados Unidos, la crisis que se avecina en la década de 2020 y el triunfo más allá.
Diablo: Prefiero que no, gracias. Yo prefiero las tormentas perfectas y permanentes. Además, ya no quiero andar recomendando actores y autores, que luego se arrepienten a última hora de lo que, gracias a mí, practicaron en vida…
Simplicio: ¿A qué te refieres?
Diablo: Pues a la decepción que me dan la bola de políticos grouchomarxistasmaristas y similares, que a cada elección cambian de Partido y de principios, basados en el dicho del cómico Groucho Marx que afirmaba: Si no le gustan mis actuales principios morales, tengo otros. Y los corruptos se me van impunes al cielo electoral cuando ya les tenía reservado su lugar por lo menos allá en el otro mundo, en mi inframundo. Y no son sólo los políticos, sino hasta los intelectuales compostables orgánicos e inorgánicos que se reciclan con la basura, aunque estos sí dejan residuos tóxicos visibles o distinguibles.
Simplicio: Pero hay excepciones…
Diablo: No muchas, pero el que más coraje me dio que se me escabullera fue el de la reciente y singular escapatoria del “joven rebelde” José Agustín que desde que nació en 1944 Yo le había estado cultivando y cuando cumplió 19 años le promoví su novela La Tumba, que lo volvió famoso por su estilo irónico, desencantado, coloquial y grosero, salvado por el humor que se burla de las solemnidades adultas de las generaciones anteriores. Y recientemente que falleció, a los 79 años de edad, me quedé al pie de su tumba esperando por su alma para acompañarlo en su viaje de descenso a mi inframundo, en el barco de la muerte, donde le tenía reservado un camarote especial.
Simplicio: ¿Y qué pasó?
Diablo: Que me hizo un tejemaneje al aceptar de última hora la extremaunción…imagínate, el autor de Contracultura, absuelto y lleno de la gracia del Innombrable.
Simplicio: Con lo que le fueron perdonados todos sus pecados anteriores…ah, qué buena jugada, la última de la picaresca joseagustiniana.
Diablo: Esa jugada celestial superó cualquier pejemaneje terrenal mañanero que me hayan causado en este sexenio, que no son pocos.
Simplicio: Y continuarán…gracias a Ya Sabes “Quiena”.
Diablo: El Diablo se viste a la moda…hasta con faldas, con tal de continuar. Adiós, ya me voy a pasear a Davos, a reponerme con algunas almas muertas de banqueros, economistas y similares, esos nunca me fallan.
Simplicio: Pero si ya se acabó la reunión del Foro Económico Mundial…
Diablo: Es que Ya Sabes Quién quiso que lo dejaran juntar su Mañanera con una sesión de los más grandiosos políticos asistentes a Davos, pero no pudo imponerse el pejemaneje.
Simplicio: Lo que confirma que el mayor riesgo de la actualidad, según los propios asistentes al Foro, es la DESINFORMACIÓN.
Diablo: Eso es puro Fake News…
Simplicio: Y, a largo plazo, el mayor riesgo de la Humanidad es el Calentamiento global/
Diablo: Otro Fake News, es un mero cambio climático. Lo que no saben es que el calentamiento global es sólo un ensayo para cuando ellos lleguen al Infierno…
Simplicio: ¡Malvado Discordiano! Hasta hiciste que la palabra del 2023 fuera POLARIZACIÓN.
Diablo: Ciao, Discordiano tontibueno, recuerda que el camino al infierno está pavimentado…con puros buenos discordianos polarizados, jajajajajaja