Por Javier Ortiz de Montellano
Diablo: Hola, Simplicio, ¿cómo te va?
Simplicio: Ay, Diablo molón y metiche, ya vienes otra vez a turbar mi espíritu.
Diablo: Más turbado no podrías estar, mi Simply, pues veo que estás leyendo el libro “De la ética a la frenética”, de Mercedes Garzón Bates.
Simplicio: Sí, me inquieta que tu “Cartilla Frenética” sea cada día más la guía de la Humanidad, en especial en México, en vez de seguir la Cartilla Ética que propugna la Cuarta Transformación como guía para el comportamiento de sus militantes.
Diablo: Pues más bien diría que a falta de una Cartilla de Trabajo a la 4T se le impuso la Cartilla Militar…
Simplicio: Ya nada más faltaría que decretaran una conscripción obligatoria de uno o dos años para mantener acuartelada a la juventud al momento de tener derecho al voto, claro, en cuarteles separados por género, para que NADA DE ABRAZOS, porque cada día empiezan más jóvenes con sus joven-citas…y, por supuesto, adoctrinarlos en que NADA DE BALAZOS, que ya hubo bastantes.
Diablo: Ni abrazos, ni balazos…eso no me gusta. Demasiada ética y poca frenética…
Simplicio: Simplemente moral…
Diablo: Sería todavía mejor si le bajan la edad de votar a 16 años, así tendrían a los jóvenes ciudadanos y ciudadanas bajo control y serían voto seguro para Ya Sabes Quién…
Simplicio: ¡No les des ideas, demonio maldito! Ya bastante has influido a los jóvenes a estar en la oposición.
Diablo : ¿Yoooo, cuándo?
Simplicio: No te hagas el inocente, que tienes plagadas las antes benditas redes sociales con tus “influencers” pagados por X No Sabes Quién, para lanzar a toda hora millones de bots despotricando contra la 4T, esperando convertir esos bots en votos en las futuras elecciones.
Diablo: ¿De dónde sacas esas ideotas, Simplicio?
Simplicio: De la observación directa de las frenéticas prácticas que impulsas…
Diablo: ¿Y qué demonios es la Frenética?
Simplicio: La Frenética, según Garzón Bates, es el conjunto de actitudes y comportamientos que se caracterizan por la exaltación emocional, la pasión desbordada y el descontrol de los impulsos.
Diablo: Entonces, ¿la Ética y la Frenética son opuestas?
Simplicio: No necesariamente. La Ética y la Frenética pueden coexistir en la misma persona, pero la clave está en cómo se equilibran y cómo se aplican en la vida cotidiana.
Diablo: ¿Cómo se puede lograr ese dizque equilibrio?
Simplicio: Mediante el desarrollo de la inteligencia emocional y la toma de decisiones conscientes y responsables.
Diablo: ¿Y cómo se relaciona esto con mi Infierno?
Simplicio: En el Infierno, muchas almas llegan ahí precisamente por no haber encontrado ese equilibrio entre la Ética y la Frenética. Han dejado que sus pasiones y deseos descontrolados los guíen, en lugar de actuar de manera consciente y responsable.
Diablo: Entonces, ¿el Infierno es un castigo por no haber desarrollado una ética adecuada?
Simplicio : En cierto sentido, sí. Pero más que un castigo, es una consecuencia natural de haber vivido una vida sin equilibrio ni armonía.
Diablo: La Buena Vida…
Simplicio: ¡No! La Mala Vida.
Diablo: Muchas gracias por tu clasecita de Teología, mi Simply, pero yo sigo prefiriendo la Frenética.
Simplicio: No es de Teología, es de anti-frenética Humanidad…
Diablo: ¿Y eso qué es?
Simplicio: La Anti-Frenética consiste en evitar el estado de ánimo en el cual una persona se siente agitada, inquieta y ansiosa.
Diablo: ¿Por qué?
Simplicio: Eso depende de cada persona. Pero en general, es signo de un “deseo de continua mutación”.
Diablo: Entonces, ¿la 4T es frenética?
Simplicio: No, la 4T no quiere ser una mutación al azar, sino una evolución gradual y duradera, una transformación que se preserve adaptándose a los cambios internos y externos.
Diablo: ¿Más concretamente?
Simplicio: Para evitar la vida frenética es importante hacer ejercicio regularmente, comer alimentos saludables, dormir lo suficiente, y también encontrar maneras de relajarse y liberar el estrés. La meditación, el yoga, la música, la lectura, el arte en general y el disfrute de actividades placenteras son formas de liberar la tensión.
Diablo: ¿Alguna otra cosita que pueda hacerse para
obstaculizar mi labor de fomentar la Frenética?
Simplicio: Sí, aprender a priorizar y sobre todo a simplificar la vida.
Diablo: Pero, ¿en política?
Simplicio: Está más difícil…
Diablo: De eso me encargo Yo. Gracias por tu tiempo y tu sabiduría, Simplicio.
Simplicio: De nada, Diablín. Espero que hayas encontrado útil nuestra charla.
Diablo: Sí, cómo no…