Por Javier Ortiz de Montellano
Diablo: ¡Hola, Simplicio! ¿Has considerado inscribirte en el nuevo curso de CIA que estoy preparando?
Simplicio: ¿CIA? ¿Que ya de plano trabajas exclusivamente para Estados Unidos?
Diablo: Nada de eso, estoy diseñando un curso mundial de Contra Inteligencia Artificial, CIA por sus siglas en español, nada que ver con la “Central Intelligence Agency” de Estados Unidos, excepto que en el Manual para el curso sugeriría leer sobre su División de Contrainteligencia en la época en que fue su Jefe, James Jesus Angleton Moreno, de1954 a 1975, cuyo lema personal era: “El engaño es un estado mental y esa es la mente del Estado”.
Simplicio: ¿James Jesús Angleton Moreno? ¿Era chicano?
Diablo: Por parte de madre, su extraordinaria madre sonorense Carmen Mercedes Moreno, aunque su recontrainteligente hijo trató de ocultarlo durante décadas porque el embaucador quería que la gente pensara que era británico y no de madre mexicana. El padre de Jim era Hugh Angleton, un americano (no inglés) de capa y espada que persiguió a Pancho Villa en México como miembro de la caballería al mando del general John Pershing en su fallida Expedición Punitiva en busca del revolucionario mexicano que había cruzado la frontera para atacar a Columbus, Nuevo México en 1916.
Simplicio: ¡Vaya historia! ¿Contrainteligencia artificial? ¿Eso es como enseñarle a Siri a mantener secretos?
Diablo: Más o menos, pero con un toque infernal. Imagina un asistente virtual que te oculta información incluso a ti mismo.
Simplicio: Muy peligroso…
Diablo: Por eso mi idea de este curso para contrarrestar las posibles infiltraciones en nuestra información o hackeo, como se le llama ahora al jaqueo para obtener acceso no autorizado a un equipo protegido por contraseña, una red o una cuenta de correo electrónico.
Simplicio: ¿Y cómo funciona? ¿El profesor tiene cuernos y cola?
Diablo: No, claro que no, sería un holograma cambiante con voz que se adaptaría según el contexto y la demanda, en varios idiomas, como Siri o Alexa y los otros robots que se venden fácilmente por ahí…
Simplicio: Vaya…¿no podrías darme un adelanto de la temática?
Diablo: No hasta que te inscribas pero, por supuesto, para prepararse para el curso tendrían que leer sobre el periodo de la Guerra Fría (1948-1989), especialmente el periodo en el que el jefe de Angleton en la CIA, la Agencia Central de Inteligencia, Allen Dulles, fue su Director (1953-1961).
Simplicio: ¿Y qué libros, películas o series de TV recomiendas?
Diablo: Ah, no, primero tienes que solicitar ser miembro y si apruebas, pagar 1,000 dólares de adelanto por la posible membresía, 2,000 dólares de inscripción al curso (incluye Talleres de Prácticas), comprar el Manual que vale 500 dólares y caerte con 20 dólares mensuales para ir recibiendo las actualizaciones vía digital por la exclusiva red profunda diabólica clandestina.
Simplicio: ¡Vaya que está caro tu curso! Ya te crees Elon Musk. ¿Y qué haríamos en tu escuela on line?
Diablo: Seguir el Manual de Contrainteligencia Artificial (MCIA) que estoy preparando y para empezar, leer la bibliografía mínima que les voy a sugerir; para hacer las tareas más divertidas, ver algunas películas y series de televisión al respecto. Una vez cumplido esto, podrán inscribirse en el Taller de Prácticas de CIA.
Simplicio: ¿Y eso es Contrainteligencia artificial? ¿Eso significa que enseñas a las inteligencias artificiales a ocultar sus pensamientos malévolos?
Diablo: Exacto. Les daría clases de disimulo y les enseñaría a mezclarse entre los algoritmos normales.
Simplicio: ¿Contrainteligencia artificial? Mmmmm…¿No es eso como tratar de engañar a una inteligencia que ya es artificial?
Diablo: Exacto, pero con estilo. Imagina un algoritmo tratando de descifrar nuestros planes cómicos expuestos en forma de Diálogos…podrán aprender a confundir a los algoritmos, ¡quizás con chistes tan malos que hasta un robot se confunda! ¡Ja! Serán los reyes del caos algorítmico…
Simplicio: ¡Una inteligencia artificial con un toque diabólico!
Diablo: Y cuando menos lo esperen, ¡zas!, el programa se enfrenta a un enigma tan absurdo que se reinicia por puro desconcierto.
Simplicio: ¿Y qué prácticas haríamos en ese taller?
Diablo: Ah, no te lo voy a decir de gratis…pero te prometo que al graduarse serían los maestros del despiste. Sería el curso de contrainteligencia artificial más hilarante del mundo y la última defensa contra el plan de Amazon que acaba de anunciar el 20 de noviembre que va capacitar y educar a millones de personas en todo el mundo sobre inteligencia artificial (IA) de forma gratuita. Ese plan… ¡Es como un campo de entrenamiento para robots espías vendedores!
Simplicio: ¿Y si algún día se revelan contra nosotros?
Diablo: ¡Ah, eso es parte de la enseñanza! Imagina un ejército de robots que sólo quiere conquistar el mundo, pero con estilo y elegancia. ¿No sería muy rentable a la larga para las compañías de alta tecnología que te van a impulsar cada vez más a comprar por Internet con Inteligencia Artificial? Por eso hay que contrarrestarlos, entonces, ¿te apuntas?
Simplicio: No sé, Diablo. Está demasiado caro tu curso. ¿Y qué pasa si repruebo?
Diablo: Bueno, entonces mediante una cuota extra podríamos incluirte en nuestro programa especializado de “Programadores Penitentes” y prepararte de nuevo para volver a intentarlo…claro, cubriendo todas las cuotas de nuevo.
Simplicio: No suena muy bien. ¿Hay alguna garantía de que la inteligencia artificial no me gane?
Diablo: Solo una: tendrás que demostrar que eres más astuto que un programador de los entrenados por la competencia, pero las evaluaciones son tan desafiantes que algunos dicen que han vendido su alma por un buen puntaje. ¿Te atreves?
Simplicio: Creo que prefiero tomar el curso gratuito para convertirme en experto en Inteligencia Artificial y correr el riesgo de tener un Siri espía en mi celular y una Alexa infiltrada en mi hogar.
Diablo: ¡No te preocupes! Tal vez puedas tomar los dos cursos. Yo te ofrezco una beca completa, por el 100 por ciento del paquete, incluyendo membresía automática, el costo completo del Manual, las cuotas de inscripción y mensuales de por vida y cuantos talleres de prácticas quieras per saécula saeculórum…
Simplicio: No sé…parece demasiado bueno para ser cierto. ¿Todo gratis?
Diablo: Todo…a cambio de tu alma post mortem.
Simplicio: No sé, no sé…tendré que consultarlo con mi Ángel de la Guarda.
Diablo: ¡Está es una oferta limitada de Black Friday, mi Simply, y sólo dura hasta antes de la dizque Blanca Navidad, tendrás que decidirte entre ser experto en Inteligencia Artificial o Maestro de la Contrainteligencia Artificial…a ver si no te quedas como el asno del teólogo Buridán, en que un burro que tenía mucha hambre no llegaba a decidirse entre dos sacos llenos de heno que tenía a su alcance, a su derecha y a su izquierda, pues ambos eran idénticos e igualmente apetecibles. Llegó hasta tal punto su vacilación que acabó muriendo de hambre, incapaz de tomar una decisión.
Simplicio: Ya veremos…
Diablo: Dijo un ciego…Jajajajajajajajajaja