Por: Víctor M. Zendejas Orozco*
Poco más de un año le ha costado a Adrián González recorrer América Latina y lograr su sueño de haber llegado a la Patagonia en este mes de enero, propósito que se impuso en diciembre de 2022.
Su ilusión, hecha realidad por él mismo, es culminar su viaje de promoción a beneficio de los discapacitados de todo el mundo con su regreso triunfal a México, pero tal ha sido la recepción, hospitalidad y solidaridad que las diversas comunidades y pueblos del continente le han brindado, que muchos de ellos le impiden regresar por el momento.
En diversas naciones como Argentina, Chile, Brasil, Ecuador, entre otras, le han hecho honores, entrevistas en medios escritos, redes sociales y electrónicos. Hasta una película sobre su hazaña le han prometido que se podría hacer.
El arduo y sinuoso recorrer por caminos hospitalarios, agrestes y peligrosos lo ha llevado a cabo en su tricicleta tipo deportiva para discapacitados. Adrián González no mueve sus piernas después de un accidente que lo daño severamente de la columna vertebral cuando salía apenas de la adolescencia.
Ha pasado por todos los climas, desde los más calurosos hasta los de frio extremo que lejos de desanimarlo le ha impuesto un reto a superar, no solo por las inclemencias del tiempo sino también las económicas, pues su llegada casi al final de su meta, Argentina, lo hizo enfrentar también la dureza de la inflación por lo que sus recursos económicos para continuar el final de su viaje se han visto mermados.
Sin embargo, la gran solidaridad y hermandad de los latinoamericanos le han dado un respiro para poder continuar con cierta holgura el final de su viaje que podría ser en las próximas semanas ya que de la Patagonia tiene que regresar a la capital argentina donde le espera otra cálida recepción y su regreso en avión a México, donde sus familiares espera sea recibido con el ánimo de sus compatriotas y autoridades.