Por: Víctor M. Zendejas Orozco*
Las políticas en materia ambiental y crecimiento sostenible que han llevado a cabo el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) se han encaminado al fracaso y a la decepción de organizaciones ambientalistas y de justicia económica.
Varias organizaciones realizaron una manifestación frente a la sede de ambos organismos en Washington para exigir un “verdadero” compromiso ambiental y políticas “reales” que mitiguen el calentamiento global.
No bastó que en junio de 2021 en su más reciente enunciado ambos organismos fijarán: “frente a las dos crisis –la COVID-19 y cambio climático- el BM y FMI pusieron en marcha el Grupo asesor de alto nivel sobre recuperación y crecimiento sostenible e inclusivos, con el fin de contribuir a garantizar una recuperación sólida y trazar un camino hacia un desarrollo verde, resiliente e inclusivo en la próxima década.”
Una parte de la información de agencias y corresponsales de medios en la capital de Estados Unidos, entre ellas la agencia EFE, citaron que la organización civil Avaaz reclamó más acciones frente al cambio climático.
El cambio climático, las sequías recurrentes, las escasas lluvias y el crecimiento irracional de las ciudades, así como un bajo presupuesto para el medio ambiente acotado por las deudas externas que países como México tienen que pagar a los acreedores internacionales impiden que se cumplan normas globales que esos mismos acreedores intentan imponer.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) “decenas de miles de hectáreas han sido arrasada en todo el mundo por las altas temperaturas y las sequías. La agencia de la ONU para el medio ambiente informa que ésta destrucción seguirá en aumento. Es necesario adaptar los bosques naturales al cambio climático, lo que incluye tomar medidas de conservación protección y restauración que prevengan la deforestación y los incendios.”
Está clarísimo que ello implica una reducción o una anulación de la deuda de los países en desarrollo para que puedan destinar más recursos y hacer frente al impacto del cambio climático y las sequías.
Si no se diseña un mecanismo financiero en ese sentido entonces los organismos mundiales en mención están llevando a cabo un discurso hipócrita. Y seguirán las protestas de ambientalistas y Organizaciones No Gubernamentales, y la muerte de la naturaleza, principalmente los bosques.
*Presidente de la ONG Franature (Fraternidad Naturista Ecologista de la Sierra de Guadalupe Mahatma Gandhi)
**Fotogalería: Aquiles Zendejas Vázquez