***Pandemia Covid-19 sigue siendo un riesgo inflacionario
Valle de México, a 7 de abril del 2022.- Mientras el conflicto geopolítico entre Ucrania y Rusia ha aumentado las presiona inflacionarias en el mundo y creado incertidumbre en México pues ambos países son importantes en el suministro y comercio de materias primas, especialmente de metales, fertilizantes y granos (comportamiento que podría mantenerse hasta 2023); los estímulos que el gobierno federal ha aplicado al precio de las gasolinas han evitado que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC, inflación), sea mucho más elevado.
Esas fueron parte de las consideraciones expuestas por los seis integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México, según la minuta difundida hoy y en la que se estableció la decisión de aumentar, por unanimidad, la tasa de referencia a 6.5 por ciento, esto como una forma de contener el fenómeno inflacionario en el país.
Por un lado, en el documento se detalló que la mayoría de los integrantes de Banxico comentó que los indicadores disponibles sugirieron que la reactivación económica podría haberse reanudado a inicios de 2022, empero, esta recuperación “sigue siendo gradual, incompleta y heterogénea entre sectores”.
Por el lado de la oferta, la mayoría resaltó que la producción industrial siguió recuperándose en enero, como reflejo del crecimiento de las manufacturas, particularmente las no automotrices, y de un repunte inusual de la minería.
No obstante, destacó la atonía de la construcción, así como de la producción y exportación de automóviles ante los problemas en las cadenas de suministro.
“La mayoría mencionó que el sector servicios siguió exhibiendo debilidad, con niveles inferiores a los previos a la pandemia y un comportamiento heterogéneo entre subsectores. Consideró que la debilidad de los servicios refleja, en parte, el efecto de la reforma en materia de subcontratación laboral”.
Por el lado de la demanda, la mayoría comentó que el consumo continuó recuperándose en diciembre de 2021, y en relación con el mercado laboral, la mayoría destacó que se observaron avances en diversos indicadores, si bien persisten las afectaciones.
En cuanto a los factores de riesgos inflacionarios, la mayoría de los integrantes de la Junta refirió que la inflación no subyacente continúa presionada, y que algunos comentaron que se siguen registrando aumentos de los productos agropecuarios.
Se mencionó que la mayoría sostuvo que la inflación de energéticos disminuyó en el margen, pero algunos indicaron que los precios de las gasolinas han sido contenidos por los estímulos fiscales del gobierno federal, y uno afirmó que sin estos estímulos, el fenómeno estaría en cifras más altas.
La mayoría mencionó que, además del conflicto Ucrania-Rusia, la inflación global siguió aumentando, presionada por los cuellos de botella y por los elevados precios de alimentos y energéticos, y que el fenómeno continúa presionado principalmente por factores globales asociados a la pandemia.