***La escritora y la ilustradora presentaron su obra en la FES Acatlán y mostraron a la comunidad universitaria este poemario que conjuga naturaleza, infancia y libertad

Valle de México, a 27 de noviembre del 2023.- En el auditorio de Posgrado de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán se presentó el libro Las palabras como alas nos enseñan a volar, un poemario escrito por Fedra del Río, con ilustraciones de Sharon Barcs, y publicado por Arquera Ediciones. La comunidad universitaria tuvo la oportunidad de acercarse al proceso de creación de la obra, conocer el diálogo entre la escritora e ilustradora y escuchar algunos poemas en voz de la autora.

La autora, Fedra del Río, detalló que este libro surgió de la necesidad de trasladar sus sueños a la acción. “Concebimos el hecho de contar historias a partir del movimiento físico, emocional y mental, donde los límites constituyan un conjunto de caminos simulados dispuestos a ser sobrevolados y, así, no solo la imaginación, sino en nuestra propia conciencia pueda conducirnos a la exploración de otras realidades”, dijo.

“Yo quise, a través de este poemario, decir que somos uno con el universo, decir que me acompaña esta naturaleza en la que habito, a la que yo me transporto, la que me da paz y tranquilidad, pero que también es una naturaleza que nos habita como seres humanos”, expresó la autora sobre la intención de esta publicación, pues considera que personas y naturaleza se amalgaman para combinar sensaciones, pensamientos y creatividad.

Por su parte, Sharon Barcs, ilustradora de la obra, contó parte de su experiencia previa al ilustrar libros, y señaló que este poemario fue diferente, pues en él sí tuvo la oportunidad de dialogar con la autora y conocer lo que había detrás de cada texto. La artista gráfica dijo que el proceso de trabajo se realizó a través de sesiones virtuales debido a la pandemia.

De igual manera, reconoció la labor de la editora, de quien sintió “un profundo respeto por su trabajo”, pues el oficio de ilustrar, dijo, a veces no llega a ser reconocido ni apreciado. “Yo quiero mucho a este libro, le tengo mucho amor”, mencionó la artista, ya que tomó este proyecto como un reto, pues la figura humana es de las cosas que encuentra más difíciles de ilustrar.

A su vez, Ivonne Solano, editora de la obra, explicó que un manuscrito solo es publicable cuando reúne pasión y técnica, así como un deseo claro de comunicar. “Creo que, a veces, la parte de la edición implica mucho de aplicar la experiencia de vida, la experiencia lectora y, principalmente, la emotividad”, comentó. La también egresada de la licenciatura en Periodismo y Comunicación Colectiva en la entonces ENEP Acatlán, celebró la capacidad que la escritora tiene para trasmitir sensaciones como pisar el pasto y sentir la lluvia, todo ello con un lenguaje sencillo y directo.

La editora recordó que cuando leyó esta obra, notó en ella una intención, una secuencia para leerlo, pero, al mismo tiempo, visualizó cada poema como un pequeño episodio, lo anterior, sumado a las ilustraciones, hacen que el poemario refleje la libertad de la primera infancia, del niño interior que ahora “está escondido, agobiado por tantas obligaciones”.

Al comentar la obra, el doctor Jaime Pita Chávez, gestor cultural, destacó la importancia de la ilustración como una herramienta que permite acercar a la literatura a los niños que aún no saben leer y escribir.  “Este libro, para gran fortuna de nosotros, tiene esos dos amarres, tiene una literatura que nos va a llevar hasta nuestra primera infancia”, dijo al detallar cómo los poemas le rememoraban diferentes momentos de su niñez, rodeada de naturaleza.

Hacia el final del evento, Fedra del Río leyó frente al público poemas como Viento, Aleteo, Ojos que vieron azul, Para un sol o Dime niño. Por último, la autora, ilustradora, editora, invitados y estudiantes posaron juntos en una selfie que inmortalizó esta presentación.