Por Javier Ortiz de Montellano 

A los publirrelacionistas, encuestadores y consultores de medios que en las “Democracias Electorales” asesoran a los partidos políticos sobre cómo presentar sus políticas y acciones en mensajes actualmente se les denomina con la frase en inglés de  “Spin Doctors” (“doctores” que remedian problemas de imagen o comunicación, expertos en el manejo de relatos utilizando complejas técnicas psicopolíticas de comunicación). 

Los Dictadores actuales también utilizan sus “Spin Doctors”, quienes empezaron por sustituir el viejo término Dictadura por el de “Autocracia Electoral”, ya que los Autócratas de hoy convocan a elecciones que, sea como sea, siempre ganan. Le recomendamos el muy actual  libro en inglés de  Sergei Guriev y Daniel Treisman, publicado en abril de este año, “Spin Dictators: The Changing Face of Tyranny in the 21st Century” (Dictadores Spin: El rostro cambiante de la tiranía en el siglo XXI).

El libro trata de cómo una nueva generación de dictadores mantiene el poder manipulando la información y fingiendo la democracia. Al igual que los doctores en publicidad en las democracias, los nuevos Autócratas hacen girar las noticias para generar apoyo, inclusive electoral. Al descubrir esta nueva forma de autoritarismo, Sergei Guriev y Daniel Treisman explican el surgimiento de tales dictadores manipuladores, describiendo cómo emergen y operan, las nuevas amenazas que plantean y cómo deberían responder las dedocracias.

El libro muestra que en las últimas décadas, una nueva generación de hombres fuertes conocedores de los medios ha estado rediseñando el gobierno autoritario para un mundo más complejo y globalmente conectado. En lugar de una represión abierta y masiva, gobernantes como Vladimir Putin, Recep Tayyip Erdogan y Viktor Orbán controlan a sus ciudadanos distorsionando la información y simulando procedimientos democráticos (sin embargo, Putin le ha dado un gran viraje a su autoritarismo al intensificar el conflicto de Rusia con Ucrania y está por verse el desenlace de su “Autocracia Electoral”).

Para entender mejor este fenómeno recordemos que el verbo inglés “to spin” puede significar contar historias y concretamente torcer un informe o historia a favor de uno; interpretar un evento para que parezca favorable o beneficioso para uno mismo o para su causa. Una táctica estándar utilizada en el “spin” (giro o darle vuelta al tema o asunto ) es reformular o modificar la percepción de un problema o evento para reducir cualquier impacto negativo que pueda tener en la opinión pública, especialmente es muy utilizado en política.

“Spin doctor” es una locución que debemos tener en cuenta para entender las actuales campañas electorales. Se basa en el significado de la jerga del verbo en inglés “to spin”,  que allá por 1950 significaba “engañar”, quizás influenciado por el modismo “to spin a yarn” (hilar una historia, que encarna un doble significado, “yarn” es hilo, que en inglés significa tanto “fibra hilada”, como también quiere decir “un cuento”). 

En otras palabras, “spin” es dar a alguien una excusa o explicación larga y detallada, inventar una trama, esto es, decir mentiras o medias verdades y engañar a la gente, hablar mal de otro, etc. Es interesante recordar que la palabra trama tiene su origen en un vocablo latino que hace referencia al grupo de hilos que, combinados y enlazados entre sí, consigue darle forma a una tela. Por analogía, La palabra trama también designa a todo enredo, artificio engañoso o argumento, en el sentido de “dar un efecto” y en un sentido indirecto “bordar” (hilar una historia).

“Spin” también evoca el “efecto”, como el que se le da a una pelota de tenis o al hacer girar un trompo. Al distorsionar los hechos o la información para presentarlos desde un ángulo favorable, los médicos del girodirigen la opinión pública proporcionándole eslóganes, revelaciones e imágenes que puedan influir en ella, al poner en escena los eventos que la reorientan en el mundo. En este sentido, sus técnicas de influencia cercanas a la mercadotecnia renuevan las clásicas técnicas de propaganda.

La Comisión General de Terminología y Neología francesa recomendó desde 2007 el uso de “modelador de imagen” para reflejar esta función. El “spin doctor”, oficialmente un “asesor de relaciones públicas ”, recibe otros apodos, como gurú, mentor, eminencia gris, creador de presidentes o dorador de imágenes.

La misión del “spin doctor” es, pues, simple y directa: consiste en “decir cosas buenas sobre …”, adaptar el mensaje de su candidato a las supuestas expectativas del electorado, “embellecer” la apariencia de sus Candidatos-Clientes para hacerlos atractivos y populares. Para ello, pone al servicio una combinación de técnicas de storytelling (contar una “historia bonita”) y principios de publicidad o mercadotecnia.

Además, algunos “spin doctors” no dudan en recurrir a estrategias indirectas y más sucias: métodos de desprestigio de un competidor, desinformación, montajes y producción de eventos, arreglo artificial de negocios para defender una causa o denigrar a otra, filtraciones, etc.

En teatro, el “spin doctor” significa la persona, generalmente un dramaturgo profesional, empleada para mejorar un guión, especialmente, poco antes del estreno de la obra (¿Quién puede negar que hoy, más que nunca, la política es Teatro?).

Más recientemente, como sustantivo, “spin” ha llegado a significar un giro especial como cuando un futbolista le da “chanfle” al balón, o un lanzador de béisbol hace que la pelota se curve, y así cuando en política le damos nuestro propio giro (interpretación) a una historia, y torcemos el hilo para que la trama se adapte a nuestras predilecciones o intereses.

En el fútbol, la palabra chanfle es utilizada desde los años 60. Aunque originalmente este término venía del francés chanfrein, que significa corte curvo, en México el sonido se fue adaptando a lo que hoy conocemos como “Chanfle” y en 1992 la Real Academia Española aceptó oficialmente la palabra (Golpe o corte oblicuo producido en alguna cosa) para definir un objeto que lleva una trayectoria oblicua; es decir, la dirección curva que lleva el balón al patearse con chanfle…

En México, se han venido utilizando estos “spin doctors” en la política y, especialmente, con fines electorales. Recientemente se dio a conocer que el Gobierno de la Ciudad de México contrató al famoso “Spin Doctor” catalán Antoni Gutiérrez-Rubí, consultor que ha asesorado a distintos candidatos y candidatas en España y Latinoamérica y que llevó a Gustavo Petro a la Presidencia de Colombia en junio pasado. El Gobierno de la Ciudad de México pagará alrededor de 400 mil pesos al especialista en comunicación política por las “asesorías” en redes sociales y comunicación digital que les dará durante siete meses, informó la Jefa de Gobierno, Claudia Scheinbaum. 

Usted dirá si esta asesoría tiene o no chanfle…anticipado.