Por Vidal Ibarra Puig[1]
Finalmente, el 14 y 15 de noviembre AMLO asistirá a la reunión de APEC en San Francisco, California, Estados Unidos.
AMLO reconsideró su posición de no asistir, pues insiste en que la presidenta de Perú, Dina Boluarte, desde su punto de vista es “espuria”, cuando en realidad el que violó la Constitución peruana fue el expresidente Pedro Castillo, y de ahí su inhabilitación por el congreso de Perú, posición avalada incluso por la mayoría de los miembros de su partido.
Entonces, después de que el presidente Biden (al que se tardó mucho en reconocer como presidente electo de Estados Unidos, siendo de hecho de los últimos presidentes en felicitarlo), le dio dos opciones para reunirse, finalmente decidió ir a la cumbre de APEC.
Pero ¿qué es APEC?
El Foro de Cooperación Económica Asia – Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) es un foro económico regional establecido en 1989 para aprovechar la creciente interdependencia de Asia-Pacífico. Los 21 miembros que conforman APEC apuntan a crear una mayor prosperidad para la gente de la región promoviendo un crecimiento equilibrado, inclusivo, sostenible, innovador y seguro, acelerando la integración económica regional. Ver mapa adjunto (fuente: APEC)
El peso económico de APEC es muy significativo: sus 21 miembros representan más del 50 por ciento del PIB mundial y más del 40 por ciento del comercio del mundo.
Los tres pilares de APEC son: la liberalización del comercio y la inversión, facilitación para hacer negocios, y la cooperación técnica.
APEC promueve la transparencia y el establecimiento de mejores prácticas en los procedimientos y reglamentos relacionados con el flujo de bienes, servicios y capital en Asia-Pacífico, la región más dinámica de años recientes. Todo lo anterior brinda certidumbre y confianza a los operadores económicos de la región para hacer negocios.
México se adhirió a APEC en 1993 con el objetivo de expandir y diversificar los vínculos económicos con Asia-Pacífico y tener mayor presencia económica en el mundo.
Si AMLO hubiera continuado con su posición de no asistir a la cumbre, se hubiera perdido una gran oportunidad (una más) para platicar con sus pares y plantear problemas comunes a todos estos países. La falta de visión de la actual administración he hecho que México pierda presencia a nivel internacional, echando para atrás todo lo ganado en los foros internacionales con las posiciones dignas de México en los diversos foros internacionales.
¿Y qué tiene que ver el estado de Guerrero con esto que estamos platicando?
Pues nada más y nada menos que México podrá exponer de viva voz los problemas derivados de Otis y solicitar ayuda, que por lo demás algunos países ya han ofrecido. Por cierto ¿sabe usted si el gobierno mexicano la ha aceptado y cómo se está canalizando?
Será el momento de pedir prestada maquinaria pesada para remover escombros; equipos para hospitales y reactivar los que operaban en Acapulco, los cuales tuvieron que enviar a sus pacientes, incluidos muchos niños, a otros hospitales en otros estados de la república.
Será la oportunidad para pedirles a los gobiernos y empresarios (que también asisten) que inviertan en Acapulco, en el sector hotelero y en todas las actividades del sector turístico.
También podrá solicitar apoyos para construir puentes artificiales que permitan la llegada de barcos con ayuda de todo tipo: material sanitario, bombas de agua, plantas de luz, alimentos, medicinas, etcétera.
Y eventualmente, podría solicitar apoyos financieros en condiciones especiales para la reconstrucción del puerto.
Luego entonces, estimada lectora, estimado lector, AMLO no podía faltar a esta cumbre de APEC, pues las finanzas del país no están sanas; a menos que se considere que un valor de los RFSP, que se prevé se ubiquen al nivel de 5.4 por ciento del PIB para 2024, sea “sano”, después de estar en 3.9 por ciento del PIB en 2023, según estimaciones.
Para nosotros estas finanzas no están sanas, al contrario, hay que prever si no será necesario llevarlas a terapia intensiva de fallar las variables de respaldo (vea usted por favor nuestras anteriores colaboraciones).
Cuide usted su salud, y cuide, si tiene, su dinero. Y no lo olvide: ni Abdala ni Sputnik han sido reconocidas por la Organización Mundial de la Salud como vacunas válidas contra el virus del Covid19 y sus variantes.
[1] Profesor en el Departamento de Economía, UAM Azcapotzalco.