Empresas y Comercio, Finanzas Públicas

Edomex: deuda, nómina y pensiones asfixian gasto en salud, educación e infraestructura

Evolución gasto PC-Edomex

***En los últimos cinco años, obligaciones financieras aumentaron 30.8 por ciento y el pago de pensiones 40.2 por ciento; la nómina creció 21.7 por ciento

Valle de México, a 11 de julio del 2022.- El gasto por habitante (per cápita) en materia de infraestructura y salud en el Estado de México registró las mayores reducciones en los últimos cinco años, esto como consecuencia de la disminución del espacio fiscal derivado de la baja en los ingresos y la recaudación local, aunado al sostenido incremento de diversas obligaciones financieras y gastos ineludibles como el pago del servicio de la deuda e intereses y pensiones, además de nómina.

El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria A.C. (CIEP) difundió recientemente el análisis denominado “Finanzas Públicas Locales: hacia una nueva coordinación fiscal”, en el que destacó “la importancia de contar con un sistema de coordinación fiscal residente y con finanzas públicas fortalecidas”, pero también planteó “las condiciones actuales y retos en los principales rubros del gasto público en las entidades federativas”, sugiriendo además que el fortalecimiento de la recaudación local debe ir aparejado de más y mejores bienes y servicios públicos.

En este sentido, el documento expuso los resultados de una minuciosa tarea por cada estado del país, y en el caso del Estado de México dio a conocer la situación imperante estableciendo, en términos generales, una caída del  espacio fiscal per cápita general del orden del 25.5 por ciento (a nivel nacional fue de 27.5 por ciento), tal como difundió Monitor Financiero en su momento.

En los detalles de la investigación, resultó que en la entidad mexiquense dos rubros son los que mayor reducción de gasto por habitante han registrado durante los últimos cinco años: salud e infraestructura.

Espacio Fiscal per Cápita Edomex (Gráfica.CIEP)

Los datos del CIEP fueron reforzados con una comparativo de cada uno de los rubros mencionados en el reporte, con cifras de diversas fuentes: ley de ingresos y egresos estatales y federales, Secretaría de Hacienda y Crédito Público, INEGI, Centro de Estudios de la Finanzas Públicas (CEFP) e Instituto de Seguridad Social del Estado y Municipios (ISSEMyM).

Así, en salud per cápita, de 3 mil 430.3 pesos en el 2018 se pasó a 2 mil 623.8 pesos, una reducción de menos 23.51 por ciento o menos 806.5 pesos menos.

Por el contrario, el pago para pensiones se incrementó de 11 mil 608 millones 140 mil pesos al final del 2018, a 16 mil 577 millones 500 mil pesos al cierre del 2021, es decir, aumentó 42.81 por ciento, casi 5 mil millones de pesos (4 mil 969 millones 360 mil pesos en números redondos), según informes anuales del ISSEMyM.

Los aumentos son consecuencia de un mayor número de pensionados: de 64 mil 649 al final del 2018 se pasó a 73 mil 726 (14.04 por ciento más o 9 mil 077). Para el ejercicio fiscal del 2022, se proyectaron 15 mil 287 millones 927 mil 993 pesos para el pago de pensiones.

Pensiones-2018-22

Mientras, el gasto per cápita en infraestructura la disminución fue de 2 mil 570 pesos a 914.2 pesos (2018-2022), esto es, menos 64.43 por ciento o Un mil 655 pesos menos en el lapso referido, el de mayor impacto en el último lustro entre los indicadores analizados por el CIEP.

En este sentido, es pertinente mencionar que las autoridades estatales han tenido que recurrir a la contratación de créditos con la banca comercial y de desarrollo para financiar obras diversas, incluso para reencarpetar vialidades, como en la región sur de la entidad, y otras de conectividad con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), esto a cambio también de ampliar la concesión por casi 30 años más del Circuito Exterior Mexiquense (CEM) a la empresa Aleática (antes OHL), que lo viene operando desde 2003 (el plazo concluirá en el 2063).

De hecho, el rubro de inversión pública se redujo de 21 mil 491 millones 887 mil pesos en el 2018 a 16 mil 247 millones 297 mil 196 pesos en el 2022, esto es, menos 24.4 por ciento, una diferencia de menos 5 mil 244 millones 589 mil 980 pesos.

En tales condiciones, las obligaciones financieras (deuda pública) del Estado de México pasaron de 45 mil 200 millones al segundo trimestre del 2018 a 59 mil 130 millones al primer trimestre del 2022, un aumento de 30.82 por ciento o 13 mil 930 millones de pesos más, de acuerdo con los consecutivos del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), del Congreso Federal.

Obligaciones-2018-22

Al efecto, en el presupuesto de este año se autorizaron 11 mil 967 millones 979 mil 101 pesos para el pago de amortizaciones de la deuda y disminución de pasivos, distribuidos en 5 mil 525 millones 474 mil 687 pesos para la interna y para la deuda pública 5 mil 525 millones 474 mil 687 pesos, siendo 4 mil 642 millones 403 mil 877 pesos del costo financiero de la deuda pública y 883 millones 070 mil 810 pesos por amortización, según La Ley de Egresos del Estado de México para el 2022.

En la Ley de Egresos del 2018 se proyectaron 10 mil 807 millones 048 mil 338 pesos para el pago de amortizaciones de la deuda y disminución de pasivos, de los cuales 4 mil 496 millones 810 mil 720 pesos fueron para cubrir el costo financiero de la deuda (intereses) y 3 mil 754 millones 365 mil 899 pesos para amortizar la contratación de créditos, un total de 8 mil 251 millones 176 mil 619 pesos para el pago de la deuda.

De modo que el los recursos para amortizaciones de la deuda y disminución de pasivos pasaron de 10 mil 807 millones 048 mil 338 pesos en el 2018 a 11 mil 9567 millones 979 mil 101 pesos en el 2022, un aumento de 10.74 por ciento (Un mil 160 millones 930 mil 763 pesos más).

En cuanto al gasto de nómina (Capítulo 1000, servicios personales), este pasó de 55 mil 510 millones 506 mil pesos en el 2018 a 67 mil 555 millones 296 mil 656 pesos, es decir, se incrementó 21.7 por ciento (12 mil 044 millones 790 mil 656 pesos más).

Nómina-2018-22
Nómina-2018-22

Pago de nómina, deuda y pensiones están entre los gastos ineludibles, igual los que provienen de las Aportaciones, vía gasto federalizado, los cuales están etiquetados para aplicarse en diversos programas.

PIB e ingresos per cápita, también a la baja

Por otro lado, en el documento del CIEP se dieron a conocer los resultados de la evolución de otros rubros, destacando también los casos del PIB estatal per capita e ingreso per cápita, ambos con reducciones de consideración.

El PIB per cápita en el Estado de México (que se refiere a lo que le tocaría a cada mexiquense si se distribuyera la riqueza que se genera en la entidad en un año -PIB-, y es lo que mide el nivel de vida de la población) se redujo de 143 mil 142.3 pesos en el 2018 a 120 mil 386.9 pesos en el 2022, esto es, menos 15.9 por ciento o menos 22 mil 755 pesos.

En cuanto al ingreso per cápita, que determina el ingreso que recibe, en promedio, cada uno de los habitantes de la entidad para subsistir, también disminuyó en los últimos cinco años: de 16 mil 056.8 pesos bajó a 13 mil 408.4 pesos, es decir, menos 16.49 (2 mil 648 pesos menos).

El gasto per cápita en educación igualmente reportó saldo negativo del 2018 al 2022: de 6 mil 940.3 pesos pasó a 6 mil 102.3 pesos, menos 838 pesos o 12.07 por ciento menos.

Mientras, el gasto por habitante en materia de seguridad fue de los que menos reducciones mostraron: de 1,694.8 pesos bajó a 1,651.2 pesos, esto es, una variación de menos 0.08 por ciento (menos 43.6 pesos).

Ingresos brutos-18-22

El único rubro que reportó un saldo favorable fue el de las pensiones por habitante: de 1 peso en el 2018 pasó a 1.1 pesos en el 2022, lo que significó una variación de 10 por ciento y absoluta de 0.1 pesos, todo de acuerdo con el documento del CIEP.

Es pertinente observar que los ingresos brutos en las arcas públicas del Estado de México, sumado el gasto federalizado (Participaciones y Aportaciones, principalmente) y la recaudación local, han venido reportando una gradual disminución: de 343 mil 224 millones 656 mil pesos en el 2018, a 322 mil 125 millones 220 mil 703 pesos, proyectados estos para el 2022.

Lo anterior significa una reducción de menos 6.15 por ciento o 21 mil 099 millones 429 mil 297 pesos menos, casi dos veces lo que se paga por amortización de la deuda y disminución de pasivos.

A todo esto hay que agregar el hecho de que para el Estado de México el gasto federalizado, del cual depende en más de 87 por ciento, ha registrado un crecimiento casi testimonial en cinco años: sumadas Participaciones y Aportaciones (principales componentes del gasto federalizado), de 221 mil 303 millones 891 mil pesos en el 2018, en el 2022 contará con 221 mil 918 millones 100 mil pesos, lo que significa un magro 0.28 por ciento de incremento o 614 millones 209 mil pesos más.

Aquí es importante destacar que los ingresos de la entidad mexiquense vía gasto federalizado y recaudación local cayeron a 313 mil 369 millones 212 mil pesos en el año 2020, esto como consecuencia del recorte generado por la pandemia Covid-19, y luego a 303 mil 120 millones 223 mil 774 en el 2021, esto combinando las consecuencias de recaudación por el fenómeno biológico con los resultados poblacionales del censo del 2020 por parte del INEGI, que arrojaron 16 millones 992 mil 418 millones de mexiquenses, Un millón de habitantes menos, según el gobierno del Estado de México.

Los conteos poblaciones son utilizados para calcular la distribución de recursos, de modo que el gobierno estatal interpuso un recurso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), pero por una falla técnica de las autoridades mexiquenses hizo que perdiera el litigio, dejando de percibir alrededor de 3 mil 415 millones de pesos.

En el proyecto de resolución aprobado por la SCJN en enero de este año, se expuso que las cifras de cualquier estudio del INEGI pueden apelarse mediante los recursos previstos en la Ley del Sistema Nacional de Información y Estadística y Geografía, pero esto no lo llevó a cabo el gobierno del Estado de México.

Vías para ampliar el espacio fiscal

En una parte de su investigación, el CIEP sugirió cuatro vías los estados para poder lograr un mayor gasto por habitante:

1.-  Incrementar sus ingresos propios, impulsando la tributación local o un mayor cobro por derechos y aprovechamientos.

2.- Repriorizar el gasto público. Dar prioridad al financiamiento de las demandas esenciales de la población y cubrir las brechas presupuestarias de aquellos servicios que abonan al desarrollo, como la salud y la educación, pudieran ser detonantes para mejorar la vida se sus habitantes.

3.- Reestructurar deuda. A pesar de que este mecanismo se encuentra regulado por la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios, la mayoría de las entidades han recurrido al refinanciamiento de su deuda de corto plazo para ampliar su espacio fiscal. Aunque lo anterior permite hacer frente a las obligaciones de corto plazo, el costo que tendrán que pagar las futuras generaciones puede ser aún mayor, y

4.- Financiamiento por otras fuentes. El financiamiento podría encontrarse limitado a proyectos específicos, por lo que mientras sea dirigido a proyectos de alto rendimiento económico, podrá ser una manera limitada de ampliar el espacio fiscal. Algunos ejemplos son el financiamiento a través de asociaciones público-privadas o bien por iniciativa de particulares nacionales.